Este miércoles la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) en el estado Táchira amaneció fuertemente custodiada por funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), quienes acordonaron los alrededores y las vías de acceso al lugar.

La medida, según explicaron los uniformados a transeúntes y automóviles que circulaban por el lugar,tuvo como fin la protección de la sede del Poder Electoral tras la convocatoria realizada por la oposición venezolana para exigir celeridad y condiciones apropiadas para la recolección del 20% de las rubricas que finalmente activarían la revocatoria del mandato al presidente venezolano Nicolás Maduro.

Un fuerte aguacero, que desde la madrugada azotó no sólo a la ciudad de San Cristóbal, sino a la mayor parte del territorio tachirense, caía sobre uniformados y manifestantes; mientras la actividad cumplida por las fuerzas opositoras del Táchira se llevó a cabo con total normalidad, y sin que se produjesen enfrentamientos.

Pese a la fuerte militarización en los alrededores de la sede del Consejo Nacional Electoral en Táchira, unos 500 manifestantes acudieron a la convocatoria realizada la pasada semana desde Caracas por los líderes de la Mesa de la Unidad Democrática, cuando más de un millón de venezolanos se movilizaron con el mismo fin.

Eduardo Marín, representante del partido Primero Justicia, denunció que todas las sedes regionales del CNE a nivel nacional fueron militarizadas y que adicionalmente el ejecutivo dio la orden de no laborar en esas instalaciones este miércoles, por lo que el documento preparado por la MUD fue entregado a uno de los vigilantes del órgano electoral.

Por su parte Santiago Contreras, coordinador ejecutivo de la Mesa de la Unidad en el Táchira, señaló que “la oposición continuará exigiendo de manera pacífica pero firme, que el órgano electoral cumpla con la Constitución y fije una fecha para la revocatoria del mandato a Nicolás Maduro”.