Luego de los actos vandálicos que dejaron tras de sí millonarias pérdidas y más de 30 establecimientos comerciales destruidos en la fronteriza población de La Fría, capital del municipio García de Hevia del estado Táchira, directivos de la Asociación de Comerciantes de esa localidad expresaron temor porque este tipo de situaciones vuelva a repetirse en los próximos días. (Lea: Saqueos en La Fría, en frontera con Puerto Santander)

Según explicaron, poca o nula fue la actuación de los diferentes cuerpos de seguridad, para frenar la estampida de seres humanos que arrasó a su paso no sólo con víveres y artículos de primera necesidad; sino también con computadoras, vitrinas, mobiliario y hasta efectos personales que se encontraban al interior de los negocios afectados.

“Nosotros vimos cómo vecinos y dirigentes comunales de diferentes sectores de La Fría participaron en esos saqueos, hay videos de seguridad, grabaciones de particulares y cientos de fotografías, por lo que exigimos a las autoridades investigar y detener a los verdaderos responsables de éstos hechos”, dijo Iván Rodríguez, Vicepresidente de la Cámara de Comercio de García de Hevia.

Al mismo tiempo acotó que hay fuertes rumores entre la población, de que se está organizando una acción similar para el venidero 28 de diciembre y ante ésta situación muchos comerciantes están tomando previsiones.

“El día de los saqueos, vimos que un dueño de una zapatería al ver su negocio rodeado de personas en actitud violenta hizo dos disparos al aire y eso disuadió por un rato a los saqueadores. Entonces todos empezamos a buscar las armas que tuviésemos a la mano, pistolas, escopetas, cuchillo, palos, machetes… para defender nuestros negocios; y eso volverá  a pasar si se repiten situaciones como éstas”, advirtió otro de los comerciantes.

Mientras tanto, agregó, algunos propietarios han contratado vigilancia nocturna, mientras otros han optado por dormir dentro de sus establecimientos, han reforzado la seguridad de las santamarías y puntos de acceso, contra los que dejan carros y camiones estacionados en las noches, para dificultar el acceso a los vándalos.