Un Deportivo Cali empujado por el ímpetu y la ambición de sus canteranos y por el aliento de más de 30 mil espectadores, logró el domingo en la noche el penúltimo paso de su objetivo en este primer semestre, al clasificarse para la gran final de la Liga Águila.

Los azucareros vencieron a Millonarios en tiempo reglamentario (1-0), y le repitieron la dosis a los embajadores en la tanda de penales (4-3), para llegar a la última instancia donde se encontrará con el Medellín.

Los héroes de la clasificación fueron todos esos canteranos que corrieron y metieron hasta alcanzar el objetivo; pero en esa tarea colectiva sobresalió de manera brillante uno de los tres veteranos, el arquero Ernesto Hernández, quien detuvo dos remates desde el punto penal que fueron decisivos.

En los 90 minutos el Cali fue inmensamente superior a Millonarios; desde el pitazo inicial controló el balón, lo tocó de primera y llegó con claridad a posición de gol, convirtiendo en figura al arquero visitante Luis Delgado.

Los azucareros tuvieron para definirlo en tiempo reglamentario; en los primeros minutos tuvo opciones con Mateo Casierra y Hárold Preciado, quienes fueron bastante asistidos por Andrés Roa, Yerson Candelo y Helibelton Palacios.

A los 28 minutos el Cali empató la serie que perdía desde Bogotá (3-2) en gran jugada de Preciado que se la bajó a Casierra y el juvenil empalmó un derechazo imparable que desató la euforia en el estadio de los verdiblancos.

Con el 1-0 el Cali siguió apretando y perdió otras opciones. Millonarios, al cierre del primer tiempo, tuvo para empatarlo con un remate de Román Torres que se fue por centímetros desviado, lo que produjo un alivio en los más de 30 mil espectadores.

En el segundo tiempo el Cali tuvo más posibilidades que salvó Delgado ante llegadas y remates de Preciado, Roa y el mismo Yerson Candelo.

Millonarios mejoró con el ingreso de Máyer Candelo y en los minutos 74 y 80 tuvo la gloria en los pies de Maxi Núñez, pero sus remates los desvió increíblemente.

Los últimos 15 minutos fueron de ida y vuelta porque el Cali acusó el cansancio por lo hecho en el partido, y Millonarios salió más de su zona, aprovechando algunas ventajas que dio el rival.

En el minuto 90 se fue expulsado Andrés Cadavid, de Millonarios, por agresión a un jugador del Cali.

El partido terminó con una llegada del Cali que no tuvo peligro para el arco de Millonarios, abriendo un espacio grande para la incertidumbre porque todo se definiría desde el punto penal.

Por fortuna para el Cali el equipo acertó en esa lotería, dando así el penúltimo paso en el objetivo trazado. El último será el de la obtención del título.