La alegría y decisión siempre la han caracterizado, cualidades que demuestra con su sentido del humor, al admitir que dos veces se echó para atrás cuando iba a dar el sí en el altar.

Ha interpretado papeles en la televisión colombiana en novelas como Azúcar, La sombra del deseo, La lectora, Isabel me la veló, Las noches de Luciana, Amas de casa desesperadas, Mentiras perfectas, entre otras. Hoy hace parte del ‘Prime Time’ de Caracol Televisión, en la novela ‘Polvo Carnavalero’.

Esta mujer transparente, con el acento intacto de su tierra natal, prestó su piel para encarnar a la segunda costeña que interpreta en sus 34 años de vida artística: Loli María Botero. Asegura que aunque muy distinta, tiene algunas de sus virtudes y las de muchas mujeres en Latinoamérica.

Luly Bossa abrió su corazón  y habló sobre su papel en la novela, sus hijos, su rol como madre, su libro, su vida amorosa y muchas cosas más.

¿Quién es Loli?

Loli María Botero es la esposa de Teófilo, el hombre que tiene en su haber el resultado de todos los polvos. Es madre cabeza de familia y por herencia viene de mujeres solas, como un matriarcado. Con mucho sentido del humor, de la rectitud, de la fidelidad y de la lealtad. Tremendamente trabajadora. Es un personaje muy colorido, con muchos matices con relación a sus pasiones y sentimientos.

¿Qué tiene Luly de Loli?

La costa. Sin duda. Sin la costa que yo tengo, el personaje no sería lo que es. Loli es un personaje que no había hecho y que me hacía falta. El vestido de Loli me estaba esperando para ponérmelo. Me estoy gozando mucho a Loli.

¿Por qué Polvo Carnavalero es diferente?

Porque es un verdadero homenaje al Carnaval de Barranquilla. Se está documentando mucho entre escena y escena, entre chiste y chanza, lo que es  el origen y el sabor del carnaval. La novela está pegada, aunque sea imposible tener al público contento completamente.  

¿Cómo es su  rol como jefa de hogar y qué es lo mejor que ha vivido con sus hijos?

Mis hijos Lucianni de 23 años y Ángelo de 15, me han enseñado a luchar, a tener resiliencia. Para mí ha sido una lucha en la que tienes que pisar tus egos para salir adelante por ellos, por ti y por mucha gente que se da por vencida. Es la valentía que sale del coraje de ver la injusticia, pero siempre bajo la luz de Dios, porque si no te vuelves muy egoísta y vengativo.
 
¿Cuál ha sido el regalo más bonito que ha recibido de ellos?

Verlos que pueden avanzar, que se pueden superar después de mucha oración, después de mucho rogar por ellos.

¿Qué ha pasado con ‘Fuego entre las piernas’?

El libro aún se sigue vendiendo, está en las librerías Nacional y Panamericana, va poco a poco, cuando tengo temporadas en el teatro lo llevo y vendo. En el libro me burlo de todo el sistema de salud, me burlo de mí misma y hago un llamado muy fuerte a la conciencia de la gente para que recupere los valores, porque no está de más que seas un buen ser humano porque dejas una semilla en tus hijos para que encuentren algo mejor.

¿Quedaron ganas de escribir más?

Claro. He escrito teatro, tengo un cuento hace rato y quiero escribir otro monólogo diferente. Porque ‘Y si me caso, ¿qué?, que es el actual, es como un complemento al libro y ahora quiero burlarme un poco de lo que me está pasando con el sistema de salud más a fondo.

¿Cómo está  su corazón?

Ya voy para 9 años sola. No tengo novio ni ‘tinieblo’ ni ‘mari-novio’ (risas). Nunca me casé, me eché para atrás dos veces, pero le tengo mucho respeto al matrimonio. Tampoco soy de las que piensa que una mujer se tiene que casar porque quedó embarazada, por eso no me casé y porque el papá de mi segundo hijo nunca quiso ni saber, ni nada. Sin embargo, por ser figura pública es muy difícil encontrar a alguien que tenga la cabeza bien puesta y quiera aceptar el montón de cosas que conlleva este trabajo. Para estar mal acompañado, es mejor quedarse solo. Si va a llegar alguien, Dios lo tiene que traer con todos los juguetes.

¿Eres completamente feliz?

Tengo momentos de felicidad y momentos de mucha zozobra por mis hijos. Sobre todo por el pequeño, pero tengo que aprender, es una lección para salir adelante.

¿Qué proyectos vienen?

Ya empecé el montaje de Infieles dos, estoy terminando Polvo Carnavalero y empiezo una gira de Infieles 1. Gracias a Dios estoy ocupada, estoy tratando de salir adelante con muchas cosas y esto es lo que hay.

Su hijo Ángelo, que sufre de distrofia muscular de Duchenne -enfermedad que afecta los músculos- se encuentra recuperándose de una cirugía muy complicada que lo tuvo enyesado de los pies a la cadera y ha tenido problemas para recibir atención médica por parte de la EPS,  ¿cómo va ese tema?

Vamos luchando. Estoy a la espera de que el Tribunal Superior de Bogotá entienda la gravedad de la situación y le ordene a la EPS darle a mi hijo el tratamiento que le preserve su vida y lo ayude a caminar nuevamente. Siempre he estado ahí. Ángelo se guarda muchas cosas, pero sabe que estoy ahí y que debe tener mucha fe, porque quiere volver a caminar. Lo cruel es que la EPS Sanitas me está cobrando por mi imagen, por mi nombre, por el estrato, es decir, estratifican el derecho a la vida. Algo inhumano.

Darlin Ramírez Leiva | La Opinión