El tomar la justicia por mano propia es uno de los temas, pero no el único, que trata “La venganza de Analía”, la serie que el canal Caracol estrenará  el 15 de abril, y que es protagonizada por Carolina Gómez.

Es la historia de una mujer que decide tomar venganza contra un hombre que asesinó a su madre, todo esto en medio del mundo de la alta política y unas elecciones presidenciales.

Junto con Carolina Gómez se encuentran Marlon Moreno y George Slebi, además de actores como Geraldine Zivic, Juliana Galvis, Andrea Gómez, Matías Maldonado, Juan Alfonso Baptista, Ana Wills, Edwin Maya, Viviana Santos, Kristina Lilley, María Cecilia Botero, Brian Moreno, Michelle Manterola, entre otros.

Radicada en Estados Unidos desde hace varios años, abriéndose camino en la difícil industria del cine y la televisión en dicho país, son más de 17 años dedicados al mundo de la actuación desde aquel debut en “El autentico Rodrigo Leal” y más adelante  en “La viuda de la mafia”, entre otras.

¿De qué se trata ‘La venganza de Analía’?

Es una historia sobre el amor propio que habla de muchas cosas más allá de la venganza en sí, como el enceguecimiento por el poder que es muy interesante de ver. Entre Analía, que la defino como una antiheroína, y Guillermo Mejía (Marlon Moreno), quien es un candidato presidencial, se genera una batalla casi de cómics pero a través del universo de la política.

¿Qué le sedujo de Analía?

Que es un personaje con el cual muchos hombres se van a identificar, en especial por el tema profesional y de decisiones que ella tendrá que tomar. Es una forma de ver, dentro de la política, cómo muchas personas vuelven flexibles sus principios morales, porque Analía viene de una buena educación y buenos principios, pero los elementos que la convirtieron en el adulto que es, la suelen superar.

¿Una mujer empoderada?

Analía representa la mujer que muchas quieren ser, profesional, que ha llegado muy lejos, deseada profesionalmente por los más importantes políticos de Latinoamérica por su efectividad en su asesoría política. Por eso, es una mujer que muchas quisiéramos ser.

Sin embargo, detrás de todo ese éxito, existe un profundo conflicto que es totalmente opuesto a su realidad profesional. Todo el motor que a ella la conduce hacia su meta está fundamentado en una estructura frágil y errónea al pensar que puede hacer justicia por su propia mano.

¿Por qué su personaje desea tanto la venganza?

Ella es producto de la victimización de su madre. Por ende, se pueden imaginar cómo crece una mujer así, con fuertes conflictos emocionales y sentimentales. Su motor en la vida es la venganza por lo que le hicieron a su madre, y eso es lo que la mueve.

¿Cómo fue el trabajo junto a Marlon Moreno, su coprotagonista?

Son dos personajes con mucha presencia escénica, él como un político aspirante a la presidencia, y fue muy bonito porque los dos nos complementamos muy bien en la creación de nuestros personajes, que gran parte de nuestro desarrollo de nuestros personajes ocurrió durante las mismas escenas que hacíamos juntos.

Sin hablarnos, nos habíamos estudiado mucho, porque son personajes que terminan teniendo características muy similares.

¿Ya había hecho personajes fuertes en la televisión, ¿Analía muy diferentes a todos?

Es una mujer con poder. Con su madre adoptiva, una jueza, se puede ver cómo llegan a chocar en cuanto al tema de la justicia y los principios morales.

Esa moralidad le permite a Analía no aprovecharse de ese poder, aunque se dé cuenta que puede hacerlo para bien de sus objetivos.

¿Un personaje que debe llegar en el momento indicado de la carrera de un actor?

Llegan con los años. Creo que hay ciertas cosas que se logran en el actor que se obtienen a través de sus experiencias y vivencias, a través de los años. Hay cosas que solo comprendes con el crecimiento personal. Yo en mis cuarentas no soy la misma persona que en mis veintes.

Al terminar de grabar la serie, ¿difícil salir del personaje?

Le tenía cierto temor por las situaciones de Analía. Era un temor positivo a no hacerle justicia a un personaje que ha sido afectado por este tipo de circunstancias. Fue un proceso lindo, que entré despacito a ella, por lo que me dejó dejarla con amabilidad y hay cosas de ella que quedaron en mí y que me aportaron mucho como persona.