El asunto trascendió, hasta llegar al Consejo de ministros, donde decidieron algunas tareas urgentes para enfrentar la problemática.
Por fin la frontera
Hasta que se hizo el milagro.
Desde hace tres días, el Gobierno nacional piensa de otra manera en todo lo que tiene que ver con la frontera oriental y los problemas que genera el ingreso descontrolado de extranjeros.
Ahora, para la canciller Ángela Holguín, tan reticente ella a aceptar que esta región tiene graves problemas por razón de la laxa política migratoria diseñada por el gobierno, el asunto de la inmigración venezolana está en el máximo nivel de importancia de su despacho.
Es que hasta el martes, ni Cúcuta ni Norte de Santander les despertaban a la canciller y a otros ministerios el interés que se reclamó durante más de dos años de ver llegar miles de venezolanos, sin formalismo alguno, a copar servicios fundamentales, como salud y educación, y a hacer de umbrales, calles y parques sus viviendas.
Solo cuando los acosados habitantes del barrio Sevilla decidieron dejar atrás su reconocida tolerancia, cansados de soportar todos los abusos posibles de quienes se tomaron sus campos deportivos, solo entonces la Alcaldía reaccionó.
Y el asunto trascendió, hasta llegar al Consejo de ministros, donde decidieron algunas tareas urgentes para enfrentar la problemática originada en el hecho de que cada mes, 15.000 venezolanos sin documentos y sin nada se radican en el sitio donde los alcance la noche.
Un detalle que pudo inclinar la atención oficial hacia la frontera parece que fue la fuerte sospecha de que en el atentado terrorista de Barranquilla actuaron al menos dos venezolanos, vinculados al Eln.
No es un ingreso masivo, dice la canciller y puede tener razón, pero sí, 15.000 es una cifra de una magnitud considerable, más si se tiene en cuenta desde hace cuánto tiempo están llegando.
Lo que importa en verdad es que al parecer el alto Gobierno superó el silencio y la profunda apatía hacia los problemas de esta región, creados por la estrategia oficial de aceptar a cualquiera que se pare en la puerta de entrada, solo por el afán de que la revolución venezolana se avergüence, algo que, obvio, jamás ha ocurrido…
El Gobierno, según la funcionaria, ordenó prepararlo todo para enfrentar una eventual emergencia en caso de que la inmigración crezca, pero olvidó señalar lo que hará para ejercer, aunque sea mínimamente, los controles que se requieren en cualquier frontera del mundo.
Es de Perogrullo, pero es la verdad: si hay un control riguroso que restrinja la entrada de quienes no llenan los requisitos, los problemas que están llevando a Cúcuta, Villa del Rosario y Tibú, principalmente, a una grave crisis humanitaria, declinarán.
De lo contrario, vamos a la carrera hacia situaciones desconocidas, a una crisis cuya solución va a exigir la intervención de autoridades internacionales.
Desde luego, la parsimonia capitalina ve una situación diferente.
Pero muy distinta sería la actitud de los ministros, por ejemplo, si tuvieran que enfrentar el día a día de los cucuteños con los venezolanos, que en las oficinas públicas exigen a gritos que les atiendan antes que a los demás. Y de esto hay numerosos testimonios de rectores de colegios, atropellados por los extranjeros, que están acostumbrados a que en su país el Estado les dé todo lo que necesitan…
Ojalá los ministros vinieran unos días a vivir en Cúcuta.
Ayúdanos a seguir haciendo periodismo de calidad
Contribuye aquíComentarios
+ NOTAS
Duque sostuvo encuentro con Lenín Moreno en la frontera
El mandatario sostuvo conversaciones con Lenín Moreno sobre diferentes temas.
Antes de morir, Ana Benilda Becerra salvó a sus vecinos
Un cortocircuito provocó la tragedia en el barrio La Castellana.
La avenida del Río será más deportiva y familiar
El centro de pensamiento del Área Metropolitana tiene unos 61 proyectos estructurados para Cúcuta.
COVID-19, en aumento en la región de Pamplona
Se conocen casos de gente de los municipios de la provincia y de Toledo que llegan a la región a hacerse la prueba de coronavirus.
La delegación regional que estará en la Vuelta al Táchira 2021
Tres equipos representarán a Norte en la edición 56 de esta clásica del continente.
La muerte sigue rondando por La Parada
Jonathan José Seijas llegó hace unos meses a La Parada a trabajar pasando gente y mercancía por las trochas.
Desde hoy, alcaldía empieza a expedir paz y salvo de predial
La Secretaría de Hacienda informó que en esta oportunidad el documento se entregará mucho más pronto que años anteriores.
Tercer toque de queda se cumplió dentro de lo presupuestado
En total fueron impuestos 843 órdenes de comparendo en la ciudad y el área metropolitana.
La pandemia obliga a postergar los retiros espirituales
“No existen condiciones para el encuentro", Jairo López, presbítero de la catedral de Santa Ana.