Nuestro departamento Norte de Santander es una región estratégicamente clave y esencial para Colombia teniendo en cuenta que es una puerta importante en la frontera con Venezuela y porque como territorio con recursos y ventajas comparativas, es invaluable para el desarrollo nacional.

Tenemos el Catatumbo que es una tierra de promisión pese a la carga de problemas y necesidades que acumula, pero que sin duda es un laboratorio para el posconflicto y el desarrollo.

Contamos con una gigantesca fábrica de agua, como lo es el páramo de Santurbán, cuya mayor parte de su territorio se encuentra en la región nortesantandereana.

Somos también uno de los cordones umbilicales entre el Centro y la Costa Atlántica que es tan importante para el progreso y toda la actividad económica de la nación. 

Y Cúcuta ha sido desde siempre la vitrina de gran valía para Colombia, lo mismo que Villa del Rosario por su acción en la historia del país. Entonces es importante que el centro mire con mejores ojos a Norte de Santander, por ejemplo en un caso relacionado con la vialidad. 

El caso del puente Mariano Ospina Pérez es de vital importancia, pues es el que permite la conexión con la zona del Catatumbo y la Costa Atlántica y la región merece y necesita  una superestructura y no el mismo puente de hace más de 50 años que hoy es insuficiente para nuestros requerimientos y amenaza en cualquier momento su cierre total.

El Gobierno Nacional debe mirarnos como una región biodiversa y abstenerse de entregar a unos particulares extranjeros la licencia para las explotaciones auríferas en Santurbán que podrían  condenar a la sed a cientos de miles de familia. 

El departamento ha sido también duramente golpeado por la pandemia y su economía necesita una acción de choque para empujarla con recursos reales y de gran impacto, pero de manera inmediata y sin tantos discursos y excusas. 

El gobierno del presidente Iván Duque tiene que adelantar el plan necesario que merecemos porque así como nos da palmaditas por recibir y recibir venezolanos todos los días y a toda hora, pues también es bueno que la región sea atendida como lo fue Avianca por ejemplo.

No es que estemos poniendo la mano para que nos regalen nada pues a la hora de hacer el balance poco o nada nos han retribuido por el gran esfuerzo que estamos y seguiremos haciendo como región.

Nadie desconoce la voluntad, la diligencia y los afanes del Gobierno Nacional para enfrentar la crisis de la emergencia sanitaria, pero también nos deben entender que a Norte de Santander, así como le piden sacrificios pues que igualmente retribuyan sus esfuerzos y nos ayuden de verdad a salir de esta terrible y angustiosa situación de crisis en que nos encontramos.