La región ha tenido protagonismo en la construcción de la historia de Colombia, siendo el Bicentenario (1821-2021) de la Constitución de la Villa del Rosario de Cúcuta, uno de esos episodios de indudable relevancia, al representar el nacimiento de la República que entonces se llamó la Gran Colombia.

Para este importante aniversario -previsto para agosto del año entrante- afortunadamente no serán solamente ceremonias y actos protocolarios los que se cumplirán, sino que están previstas inversiones variadas en la región.

En el presupuesto nacional de la próxima vigencia quedaron consignadas partidas por $28.000 millones para la ejecución de proyectos que tendrán  impacto en materia de generación de empleo y de recuperación económica en esta parte del país.

Uno de ellos es el tan anhelado, diagnosticado y cacareado Centro de Convenciones para esta zona de frontera, del que tanto se ha hablado y escrito en el pasado, pero al que la celebración bicentenaria le dio el impulso definitivo que tanto se estaba esperando.

Por un lado, el Fondo Nacional de Turismo (Fontur) asignó $18.000 millones para la construcción de esta infraestructura en un predio situado al frente del hotel Villa Antigua, en Villa del Rosario.

La Gobernación de Norte de Santander le destinó otros $10.000 millones de provenientes de regalías, al tiempo que avanza en la actualización de los estudios técnicos, por $3.000 millones.

Muchos documentos, discursos, peticiones y exigencias se han hecho para que la región cuente con un escenario apropiado para congresos, exposiciones, muestras, foros, convenciones y congresos.

Por lo visto, esta iniciativa ya va rumbo a salir de los render, los planos y los documentos de prefactibilidad y factibilidad, para pasar al escenario de la realidad y así dejar de ser una utopía que  muchas veces se creyó inalcanzable.

Una vez arranquen las obras, deberá procederse a emprender la misión de ofrecer tanto en Colombia como en el mundo este nuevo servicio, para así convertir a la región en un centro y destino de negocios, dentro de la diversificación de la economía local.

La descripción de lo que se espera con esta obra, la hizo el gobernador Silvano Serrano: “Queremos un centro de convenciones que no solamente llene las expectativas de los sectores productivos de Norte de Santander sino que corresponda con la expectativas de Cúcuta y el departamento porque esta es una de las fronteras más activas en materia económica”.

Otro aspecto relevante que dejará el Bicentenario, más allá de la anunciada cumbre presidencial, es la recuperación del Parque Grancolombiano conformado por la Casa del General Francisco de Paula Santander, La Bagatela y la capilla de Santa Ana, así como la recuperación del espacio urbano desde la estatua del general  Santander hasta La Parada.

Ahí se van a invertir $10.000 millones, que a la postre deben permitir emprender el proyecto del turismo histórico en Villa del Rosario.

Esto tiene que llevar a convertirlo en un lugar obligado de visita de turistas nacionales y extranjeros dentro de las rutas del turismo histórico, más ahora que esta actividad ha pasado a ser considerada como una de las fuentes de reactivación del país en estos tiempos pandémicos.