La crisis del sector eléctrico de Venezuela será atendida con un crédito de 350 millones de dólares de la Corporación Andina de Fomento (CAF) y aprobado por la Asamblea Nacional, para la generación de 1.200 megavatios adicionales.

Maximiliano Vázquez, presidente de Fedecámaras Táchira, dijo que por causa de los cortes de electricidad que hay en el Estado, sufren los pacientes de centros de salud en cuidados intensivos, los neonatos; no funcionan las bombas de gasolina, los ascensores en edificios y se paraliza la poca actividad que hay en oficinas, comercios y fábricas.

Vázquez dijo que la estabilización del sistema eléctrico “va a traer una recuperación casi inmediata del aparato productivo, y  mejorará la calidad de vida de los ciudadanos de la región”.

Lo aprobado por el parlamento venezolano va a beneficiar a entidades en el Táchira, Zulia, Mérida, Lara, Falcón y del centro del país, seriamente afectados durante el último año por constantes y prolongados apagones.

Del total del crédito, 64 millones serán para la represa Uribante-Caparo y la termoeléctrica de La Fría, para generar 480 megavatios para Los Andes y 726 para repartir entre Zulia, Nueva Esparta y Caracas. Así como la instalación y reparación de plantas eléctricas y circuitos de alimentación para el 70 % de los hospitales del país.

Los fondos fueron gestionados por el PNUD y no serán afectados por las sanciones internacionales que tiene Venezuela, porque están amparados bajo la figura de ayuda humanitaria.