Los cultivadores pertenecientes a 12 asociaciones de productores de Hacarí, Teorama, El Carmen, Convención, San Calixto, El Tarra, La Esperanza, Cáchira y Río de Oro, están preocupados por el deterioro que están teniendo las plantaciones como consecuencia de las difíciles condiciones climáticas.

Emiro Cañizares Plata, director ejecutivo de la Asociación de Municipios de la provincia de Ocaña, sur del Cesar y el Catatumbo, indicó que en esta zona del departamento el 80% de los cultivos se vieron afectados en 2015 por la sequía y en 2016 la situación puede empeorar porque en los primeros meses del año, según el ciclo vegetativo del cultivo, se da la floración e inicio de la formación de frutos, situación que se ha visto interrumpida por la ausencia de lluvias y en caso de que no se registren entre abril y mayo, las pérdidas podrían ser del 100%.

Así mismo, Manuel Alvarado, vocero regional de la Federación Nacional de Cacaoteros, dijo que el gremio espera una reducción del 20% en la producción de 2016, frente a las 2.000 toneladas que se generaron en 2015. El funcionario explicó además que la afectación de la cosecha en la provincia de Ocaña, se dio especialmente en El Carmen y Convención, en donde hubo grandes pérdidas.

Frente a los problemas financieros que genera el daño en los cultivos y por ende la caída de la producción, el gerente zonal del Banco Agrario, Fabio Acosta, anunció que se emitió la circular 091 y 066 por parte de la banca oficial, que busca ayudar a los productores que se encuentren en dificultades.

El propósito es conocer las condiciones de los pequeños productores que han visto comprometido su patrimonio y amortizar la deuda para que no resulten mal calificados. Las alcaldías coordinarán reuniones en cada municipio y el Banco Agrario desplazará un funcionario para que estudie casos personalizados de los campesinos en cuanto a  la financiación de la deuda, recalcó Cañizares.

Convenios y proyectos

Para  mejorar la capacidad y la calidad productiva del cacao departamental, la Federación, con el apoyo del Ministerio de Agricultura, está desarrollando un convenio que permite la intervención de 750 hectáreas (350 de nueva siembra y 400 de renovación de plantaciones), con una inversión aproximada de $600 millones.

Otra iniciativa que ayudaría a mejorar la economía de los cacaoteros de Norte de Santander es el establecimiento de un punto de compra del grano. Al respecto, Alvarado dijo que la idea es tener el punto establecido este año y para eso ya se están tomando muestras de calidad del cacao.

La Opinión