El sector palmicultor es uno de los que tiene más fuerza en las Zomac, tanto así que de los 344 municipios del país que han sido más afectados por el conflicto, 72 tienen este cultivo. 

Jens Mesa Dishington, presidente ejecutivo de Fedepalma, expresó que con las nuevas políticas del Estado para estas zonas resulta de gran interés la conformación de empresas cuyo objeto sea la provisión de servicios de apoyo y conexos a la agricultura, ya que estos pueden ser vehículos para mejorar en buenas prácticas agrícolas.

No obstante, Mesa considera que en Colombia será un proceso de aprendizaje en la marcha y que existirán algunas dificultades. 

Una de las principales es que el esquema tributario definido no es adecuado, pues no reconoce el periodo improductivo de este cultivo de tardío rendimiento.

Además de lo anterior, “es lamentable e injusto que el Gobierno Nacional no haya establecido tarifas especiales (quizá no iguales a las definidas para nuevas empresas pero si menos onerosas que las tarifas vigentes) para las empresas que actualmente ya hacen patria y presencia en esas zonas tan difíciles”.

Fedepalma recomienda al Gobierno dar un impulso real para dinamizar estos sectores agrícolas a través de un mecanismo similar al incentivo tributario de exención de impuesto de renta por 10 años que creó el Congreso de La República, basado en la entrada en producción de los cultivos de tardío rendimiento (palma de aceite, caucho, cacao y frutales).

Sin embargo, considera que estos  mecanismos pueden ser vehículos para mejorar en buenas prácticas agrícolas, avanzar en la mecanización para el desarrollo de las labores culturales e incorporación de tecnología.