En pleno año del cerdo, símbolo de prosperidad en China, el ganado del país es diezmado por la peste porcina africana, la cual disparó los precios y las importaciones, pero para los expertos lo peor está por venir.

Según el ministerio de Agricultura, 1,16 millones de puercos fueron sacrificados de manera preventiva. Aunque, las autoridades informaron de una baja de 60 millones de cabezas en el primer semestre.

El virus, para el que aún no existe ningún tratamiento, causa hemorragias mortales en los cerdos, las cuales pueden ser mortales en cuestión de días.

La peste, no obstante, no representa ningún peligro para el hombre, aunque coma la carne contaminada.

“La peste porcina africana toca hoy entre 150 y 200 millones de animales” en China, estima el banco Rabobank. “Eso equivale a la oferta anual de puerco en Europa”, agregaron.

“El año pasado, la gente tenía miedo” de comer puerco porque la epidemia “era muy grave”, afirma la vendedora Feng Shuyue, frente a un puesto de chuletas de cerdo.

El ganado porcino chino, que es el más importante del mundo, disminuyó en 15 % en el primer semestre a 347,6 millones de animales, según cifras de la Oficina Nacional de Estadísticas (BNS).

Las dificultades de abastecimiento hicieron saltar los precios del puerco en 21,1 % este año, según la BNS, y podrían subir “40 % en el curso de los próximos seis meses”, advirtió el banco Nomura.

Para suplir la demanda, Pekín recurre a la carne porcina extranjera, principalmente de la Unión Europea, con un aumento del 37 % de importaciones de enero a abril, según la Comisión Europea y a la de Brasil. 

El primer brote del virus fue detectado en el noreste de China y se propagó rápidamente por todas sus regiones. Vietnam, quinto productor mundial de cerdos, y Corea del Norte están también afectadas.