El proyecto de crear un parque industrial, que lidera el alcalde de Cúcuta, César Rojas, recibió el apoyo del Gobierno Nacional durante la aprobación de la última Reforma Tributaria en diciembre del año pasado.

La aprobación en tiempo récord del proyecto que estableció el nuevo régimen de impuestos para personas naturales y empresarios, incluyó en su articulado una exención especial para las nuevas zonas francas que se creen en Cúcuta y su área metropolitana, entre enero de 2017 y diciembre de 2019.

Según quedó establecido en la reforma, los usuarios de las zonas francas del país pagarán un impuesto de renta del 20%. Pero en el caso de los empresarios de las nuevas zonas especiales de Cúcuta –en este caso el parque industrial–, la tarifa será del 15%, la misma que estaba vigente durante 2016.

Sin embargo, para que dicho descuento en el cobro pueda hacerse efectivo, el proyecto liderado por Rojas y proyectado para desarrollarse en el kilómetro cuatro en la vía a Puerto Santander, tendrá que entrar en funcionamiento antes de tres años y contar con un mínimo de 80 hectáreas y 40 usuarios, es decir, 40 empresas de producción industrial, funcionando en el lugar.

De acuerdo con el senador Juan Manuel Corzo, proponente del proyecto -junto al también senador a Andrés Cristo y el apoyo del representante Carlos Chacón–, se va a desarrollar toda una campaña a nivel nacional para incentivar la llegada de empresas y, además, hay un censo que reveló la existencia de por lo menos 300 empresas venezolanas que podrían llegar al lugar.

La idea con este parque es cambiarle la vocación a Cúcuta de comercial a industrial, generando de paso unos 5.000 empleos directos, señaló.

Parque industrial vs zona franca

El proyecto, de paso, también serviría para remplazar la zona franca de Cúcuta, porque según Corzo, ya no es útil.  

“La zona franca es inviable. Es una zona franca que está dentro de la ciudad, que no permite entrar por el transporte pesado, altera la misma movilidad de Cúcuta y que ya dentro del Plan de Ordenamiento Territorial tampoco cabe”, dijo el senador, refiriéndose al parque empresarial que funciona desde el siglo pasado sobre la avenida Los Libertadores al norte de Cúcuta y que hoy es propiedad de la Gobernación de Norte de Santander y administrada por la Cámara de Comercio de Cúcuta.

Al respecto, el gobernador de Norte de Santander, William Villamizar, dijo que si bien es cierto que la zona franca le fue entregada el año pasado, aún tiene algunos problemas de infraestructura; ya se está trabajando para su mejoramiento y se espera la llegada de $7.500 millones del Gobierno Nacional para mejorarla.

Contrario a la opinión de Corzo, el gobernador considera que la zona empresarial que funciona desde 1970 en Cúcuta es totalmente viable y con mucho potencial para ser más competitiva y en ningún momento “riñe” con el parque industrial que lidera la alcaldía de Cúcuta.

Por el contrario, Villamizar cree que al parque industrial aún es un proyecto que tiene pendientes temas ambientales, de infraestructura, de construcción, diseños, “procesos que demoran, que pueden durar varios años y mientras tanto nosotros tenemos que hacer más productiva la zona franca”.

Diego Zárate, director del programa de Comercio Exterior, explicó que en materia económica y de desarrollo empresarial, sería muy benéfico para la región la continuidad de los dos proyectos. Pero, en el caso de la zona franca propiedad de la Gobernación, se requiere inversión para fortalecer su infraestructura.

En esta misma dirección apuntó Carlos Luna, presidente ejecutivo de la Cámara de Comercio de Cúcuta, quien aseguró que entre más alternativas tengan los empresarios será mucho mejor. El vocero la entidad cameral cree también que esto puede ayudar a la especialización de los servicios que cada uno de los parques empresariales.