Si es usted de los que está pensando en adquirir un carro, tenga en cuenta cuáles son sus necesidades, su capacidad de endeudamiento y lo importante que es fijar el hecho de decidirse por un automóvil nuevo o uno usado.

Los colombianos se están motivando cada vez más a adquirir nuevos vehículos. O al menos eso se lee en los más recientes informes de la industria. Según la Asociación Colombiana de Vehículos Automotores (Andemos), en los primeros cinco meses del año el registro de nuevas matrículas de vehículos creció 2 % con respecto al mismo periodo del año pasado, al pasar de 93.260 unidades a 95.167.

El primer consejo es que defina si prefiere tener un carro nuevo, o si con un auto usado podría ver satisfechas sus necesidades. En principio, sí, el costo de un usado puede variar considerablemente.

El precio de un carro gama baja tipo Volkswagen Gol, Chevrolet Spark, Chevrolet Sail o Renault Sandero puede rondar entre los 33 y 40 millones de pesos. Sin embargo, teniendo en cuenta un kilometraje cercano a los 40 mil, el costo puede reducirse en casi 8 ó 10 millones de pesos.

Lo que debe tener muy presente, si decide irse por un automóvil usado, es el kilometraje que tenga. Entre este sea más alto reduce su valorización, pero incrementa la probabilidad de que tenga que hacer inversiones por cuenta de reparaciones.

Son dos las recomendaciones que usted debería seguir si lo que prefiere es comprar uno de estos vehículos: la primera es que este no sea modelo de más de tres años; además, que no haya tenido más de un dueño desde su primera adquisición.

“Importantísimo que se lleve a cabo un peritaje para avaluar el vehículo”, afirmó Oliverio García, presidente de Andemos.

García añadió que lo ideal es que este tipo de carros no superen los 20 mil kilómetros de rodamiento. “También se puede hacer buen negocio preguntando por aquellos vehículos que las marcas utilizan para llevar a cabo las pruebas de manejo, tienen un kilometraje bajo de rodamiento y cuentan con la garantía necesaria”.

Si lo piensa dos veces en si comprar un carro nuevo porque uno usado le valdría mucho menos, hay varias razones que debería sopesar. Si bien el pago a crédito de un vehículo termina por incrementar su precio final, hay algunas firmas que ofrecen la opción de pagar sin intereses.

“El consejo está en que si el comprador se decanta por tener un vehículo nuevo, lo compre pensando en obtener la mejor línea de crédito; se recomienda que cuente con una tasa fija preferencial de 1 ó 2 años”, afirmó Giovanni Reyes, profesor de economía en la Universidad del Rosario.

Otra de las opciones puede ser que identifique cuáles son los concesionarios que, por la compra de un vehículo nuevo, otorgan el pago de la matrícula y el Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (Soat), lo que podría significarle un ahorro cercano al millón de pesos.

Eduardo Visbal, vicepresidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), concluyó llamando la atención sobre la importancia de fijar un presupuesto para cualquiera sea la opción de compra: “Así si sea nuevo o usado, cada persona debe tener clara su capacidad de endeudamiento para que esta compra no termine siendo un dolor de cabeza”.