La guerra comercial entre China y Estados Unidos parece un mal de nunca acabar. La jugada más reciente  del presidente Donald Trump llegó al mundo de los celulares al incluir a la tecnológica Huawei en su lista negra, vetando los negocios con Google.

La decisión de compañías estadounidenses como Google de abandonar sus transacciones comerciales con la marca china para cumplir con la orden de Trump tendrá un gran impacto sobre el mercado europeo y latinoamericano, y uno mucho menor en EE.UU. y China.

En Europa y Latinoamérica, los teléfonos económicos y de calidad estándar de Huawei que usan sistema operativo Android han logrado penetrar con fuerza en el mercado, y por tanto es donde el porcentaje de usuarios que previsiblemente se verán afectados es mayor.

En Latinoamérica las cifras varían mucho según el país, destacando el 28 % de cuota en el mercado de Costa Rica, el 25 % de Perú, el 18 % de Colombia y el 17 % de Chile.

Según datos compilados por Evercore, Huawei se gasta cada año unos 20.000 millones de dólares en material electrónico y de telecomunicaciones, siendo precisamente Intel, Xilinx y Broadcom algunos de sus mayores proveedores, por lo que estas empresas perderán a uno de los clientes más poderosos de la industria.

Así las cosas, Huawei tendría en poco tiempo un sistema obsoleto que no podrá actualizarse y sin acceso a la tienda Google Play, por lo que sus usuarios no tendrán la oportunidad de acceder a miles de aplicaciones.

Sin embargo, Google dijo que “seguirá proporcionando actualizaciones de seguridad y servicios posventa a todos los smartphones, tabletas y dispositivos Huawei y Honor, tanto a los que ya se hayan vendido como a los que siguen estando en inventario en todo el mundo”.

Esto significa que los usuarios actuales de un teléfono Huawei o que estén pensando comprarse uno seguirán recibiendo las actualizaciones del sistema operativo Android. Los propietarios de un dispositivo inteligente de la marca basado en Android podrán disfrutar de él con normalidad.

¿Qué pasará?

A corto plazo, Huawei tiene pocas soluciones. 

En sus actuales aparatos es complicada la implementación de un nuevo sistema de explotación, en lugar de Android.

En los futuros aparatos, también parece difícil una alternativa: el único sistema de explotación suficientemente extendido es el iOS de Apple, disponible exclusivamente en los iPhone. 

Microsoft había intentado lanzar una versión móvil de su célebre Windows en 2010, pero solo pudo aplicarla en sus propios teléfonos. Además, los Windows Phone no tuvieron éxito y Microsoft abandonó la aventura en 2017.

A medio plazo, esta decisión de Google podría incitar a Huawei a seguir el ejemplo de Apple y proponer su propio sistema de explotación, una idea que ya se plantearon los dirigentes del gigante chino.

Huawei, número dos mundial, difícilmente puede ser ignorado por los creadores de aplicaciones, que se verían obligados a ofrecer así una versión “Huawei” de sus productos, para no tener que renunciar a una parte significativa del mercado.

Sin ir tan lejos, Huawei puede perfectamente desarrollar un “fork” (versión alternativa) de Android, versión que le sería propia aunque reutilizando la mayoría de los códigos de Android, que están en “open source”, es decir libres de derechos. Ello le permitiría conservar un producto compatible con las aplicaciones desarrolladas para Android.

Desde el gigante buscador Google, también pidieron tranquilidad a los usuarios mediante un comunicado: “Estamos cumpliendo con la norma y analizando las implicaciones. Para los usuarios de nuestros servicios, Google Play y las medidas de seguridad de Google Play Protect continuarán funcionando en los dispositivos Huawei existentes”.

Android es el sistema operativo dominante en la industria de la telefonía móvil, con un 85 % de cuota de mercado global, según los datos de la consultora IDC.

El problema llegará con los terminales que Huawei ponga a la venta en un futuro. Con el cierre de filas del gigante buscador, los próximos smartphones que lance al mercado la firma para fuera de China no podrán disponer de Android, servicios como Google Play Store o de aplicaciones como la de Gmail , y solo tendrán acceso a aquellas versiones de Android disponibles a través de las licencias de código abierto.

El problema para Huawei es de tal envergadura que algunos analistas de City aseguran que “una prohibición de software podría paralizar el negocio de móviles y equipamiento de Huawei”, según el Financial Times.

Riesgo para Google

La idea de cortar lazos con Huawei también conlleva riesgos para Google. Al margen de los iPhones, Google tiene una posición monopolística con Android, un producto que le ha permitido desarrollar servicios asociados, la geolocalización con Google Maps, etc. 

Estos servicios le son esenciales en la captación de datos de los usuarios, esencial en su modelo económico basado en la ventas de espacios de publicidad a medida, a imagen de Facebook. A mediano plazo, una ruptura con Huawei puede hacerle perder a Google el acceso a los datos esenciales de centenares de millones de usuarios.

Pero lo que representa un serio riesgo para Google, sobre todo, el desarrollo de un sistema propio de Huawei.

Además, el enfrentamiento entre Huawei y Google supone una advertencia para los demás fabricantes chinos (Xiaomi, Oppo, OnePlus...). En caso de desarrollo de un sistema de explotación por Huawei, sus competidores podrían animarse a adoptarlo, para evitar a su vez convertirse en víctimas de presiones estadounidenses.

Lucha de poderes

El año pasado, Huawei vendió 208 millones de teléfonos inteligentes en todo el mundo y elevó sus ingresos por telefonía hasta los 52.000 millones de dólares (46.500 millones de euros), un 50 % más respecto a 2017. Huawei es una compañía privada por lo que no está obligada a desnudar sus cuentas ante el mercado.

El veto de Huawei podría, además, dar al traste con los planes declarados de la compañía de liderar la industria móvil en el año 2020. Apenas cuatro puntos porcentuales separaban al fabricante chino de Samsung, el líder del sector, en el primer trimestre de 2019. 

Y es que la preocupación es grande ya que a nivel global la empresa crece a ritmos de más de 50 % en ventas y ya tiene 17 % del mercado global, cuatro puntos porcentuales por debajo de Samsung (21 %) y cinco puntos por encima de Apple, que en ventas al primer trimestre de este año este se quedó con 12 %.

La marca china solo en el primer trimestre vendió 39,3 millones de unidades y en Colombia, según los datos a octubre de Euromonitor tiene 17,3 % del market share, también después de Samsung que a esa fecha tenía 29 % y por encima de la empresa de la manzana, que en el país alcanzaba solo a 2 %.

El impulso de esta marca viene de las diferentes líneas que comercializa, que no solo están en el mercado de gama alta, como su competidor norteamericano, sino que tiene gran parte del mercado de gama media. Es por eso que según este informe de mercado, en el tercer puesto estaba la marca Alcatel con cerca del 12 %.

Wall Street sucumbe tras el veto de Google

Wall Street bajó luego que Google cortó sus lazos con el gigante chino de telecomunicaciones Huawei en medio de la guerra comercial entre Washington y Pekin.

El índice Nasdaq, de valores tecnológicos, perdió 1,46% a 7.702,37, el Dow Jones bajó 0,33% a 25.679,90 y el S&P 500 cedió 0,67% para quedar en 2.840,23 unidades.

Las acciones de Alphabet, matriz de Google, cayeron 2% pero también se desmoronaron las de otras tecnológicas como Micron Technology, Skyworks Solutions y Qualcomm. 

El veto a Huawei “llevó a vender papeles de proveedores y socios del gigante chino porque algunos como Intel, Alphabet, Broadcom y Qualcomm podrían tener ahora menores ingresos”, dijo en una nota el analista de Gorilla Trades Ken Berman.

También bajaron otras empresas de componentes tecnológicos como Nvidia (-3,05 %), Advanced Micro Devices (-2,98 %) o Micron Technology (-3,99 %).

En el mercado de obligaciones, el rendimiento de los bonos a del Tesoro estadounidense a 10 años era de 2,413% contra 2,391% del viernes.

Las bolsas europeas también cerraron con fuertes bajas ayer, en un inicio de semana marcada por las dudas en torno a las negociaciones comerciales entre China y Estados tras las medidas estadounidenses contra Huawei.

París cayó 1,46%, hasta los 5.358,59 puntos y Fráncfort perdió 1,61 %, en 12.041,29. Milán cedió 2,68% y Madrid 0,87%.

Londres, de su lado, tuvo pérdidas más moderadas, del 0,51%, a 7.310,88.