El sector agrícola manifestó su preocupación  por el impacto que puede generar la disminución de los aranceles para la producción nacional y local. Los gremios consideran que traerá consecuencias negativas al aparato productivo local, porque  permitirá la importación de alimentos sin impuestos, pero, por otro lado beneficiará a los importadores de maquinaria agrícolas.

“En los tratados de libre comercio hay verdades a medias, porque Colombia se compromete a rebajar gradualmente los gravámenes arancelarios con los países con los que suscribe el convenio, pero el sector agrícola colombiano no está preparado para asumir las consecuencias que puede generar la disminución de los aranceles”, señaló Andrés Hoyos presidente del Comité de Ganaderos de Norte de Santander (Coganor).

La semana pasada, la ministra de Comercio Industria y Turismo, Cecilia Álvarez-Correa, señaló que el Gobierno elevará de 3.490 a 3.623 el número de partidas de importación libre de aranceles, esto con el fin de paliar los costos que tiene el dólar sobre los insumos y bienes importados.

Informó que los empresarios pagarán 1,3 billones de pesos menos este año y 1,4 billones de pesos en el 2016. Según la funcionaria, la medida sería inclusive prorrogada hasta el 2017.

Hay sectores de la economía que han manifestado su inconformidad con la disminución de los aranceles, como el sector azucarero y panelero que indicaron que al entrar en vigencia el decreto de reducción de aranceles, del 117% al 70% para el azúcar,  se atentará contra la producción de azúcar y de  panela nacional.

El presidente de la República, Juan Manuel Santos, hizo un llamado a aprovechar “la oportunidad de oro” que se presenta en la coyuntura actual de la economía y aprovechar los Tratados de Libre Comercio (TLC) con los que cuenta el país.

“No hemos aprovechado los TLC, entre otras cosas porque hemos tenido una tasa sobrevaluada”, dijo.

Sin embargo, en el caso agropecuario llegarán alimentos con menos aranceles, exponiendo a los productores a competir en condiciones desiguales con los productores de los países, señaló Hoyos.

Los agricultores de Chile, Brasil, Estados Unidos y Canadá reciben incentivos, tasas de interés acordes y subsidios en la producción, en cambio los productores agropecuarios de Colombia no tienen estos beneficios, lo cual hace muy difícil que el productor agropecuario nacional pueda competir a través de los TLC, indicó Hoyos.

Los Tratados de Libre Comercio pueden impactar el aparato productivo regional, porque los productores locales producen en condiciones bastantes diferentes al resto del país por la cercanía con la frontera venezolana, señaló el presidente de Coganor.

Los productores de ganado y arroz de la frontera están expuestos al ingreso de productos del vecino país que entran al mercado local de forma legal o ilegal, disminuyendo el precio de los productos locales,  lo que crea  condiciones de desigualdad que es difícil afrontar.

Lo positivo y lo negativo

El gerente general de la Cooperativa Agropecuaria de Norte de Santander (Coagronorte), Guillermo Infante, indicó que para el sector productivo del arroz, la disminución de los aranceles es negativo, por un lado, porque permitirá la entrada de arroz a menor precio a Colombia, situación que afecta el mercado local.

Sin embargo, la disminución de aranceles para insumos y maquinaria es considerada como una medida positiva para los productores de arroz de Norte de Santander.
 
“Esta noticia es positiva porque permitirá un alivio en la compra de maquinaria agrícola, que ha incrementado sus precios por cuenta de la devaluación del peso frente al dólar”, dijo el dirigente de la Cooperativa.  

El ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, indicó que la medida se tomó para que los empresarios tengan la posibilidad de no tener que pagar aranceles, por lo menos, por el lado de la compra de insumos, indicó que “el Gobierno asume el costos fiscal”.

El funcionario señaló que a pesar de la “estrechez fiscal”, el Gobierno Nacional es consciente que para los empresarios es muy importante importar insumos y materia prima y bienes de capital que no se produzcan en Colombia sin aranceles.

El anunció de la ministra de Comercio generó expectativas en todos los sectores productivos del país, la disminución de los aranceles es un dolor de cabeza para algunos sectores, pero un alivio para otros.