Comprar vivienda propia es el sueño de casi todas las familias. En ella, se invierte mucho más que dinero. En ese bien inmobiliario se disponen anhelos, sacrificios, esfuerzo y sobre todo mucho trabajo. 

Es por eso que a la hora de comprar una vivienda propia, es normal que surjan ciertas dudas antes de tomar esa gran decisión.

¿A quién comprarle? ¿Quién me asesora? ¿Cómo comprarle?  ¿Es seguro a quién le compro? ¿Quién hizo lo que voy a adquirir? Y otras incógnitas más rodean la obtención del bien. 

Frente al tema, vale la pena aclarar las diferencias entre las dos entidades que tienen más relación o influencia en la elaboración. Ellas son las inmobiliarias y las constructoras. 

¿Qué son?

Las inmobiliarias, según María Fernanda González, gerente de La Lonja de Propiedad Raíz de Norte de Santander y Arauca, son entidades privadas que crean una interacción con el  único fin de comercializar un inmueble. 

Ya sea en la venta o arriendo de un inmueble, el papel de la inmobiliaria se basa en buscar conectar a propietario y clientes para concretar el negocio y que las dos partes queden satisfechas con las condiciones del trato.

Por su parte, Álvaro Morelli, gerente de la Constructora Monape, afirma que una constructora es aquella organización encargada de diseñar y construir proyectos inmobiliarios, de infraestructura y de otros tipos, con una base de estudios previos.

¿Qué servicios prestan?

González define cinco servicios que prestan las inmobiliarias. En primera medida debe estar a disposición del cliente en todo momento, buscar viviendas que se adapten a sus necesidades, inspeccionar las viviendas, publicitar los inmuebles y agilizar los distintos procesos. 

Frente a los servicio, según Morelli, las constructoras ofrecen a sus clientes soluciones de vivienda unifamiliares (casas), multifamiliares (edificios), de infraestructura, de servicios y otros más. 

El trabajo lo pueden hacer de dos formas: ya sea por contrato de obra, es decir que las contraten para desarrollar un determinado proyecto o lo puede hacer bajo la modalidad de venta sobre unos diseños previos.

¿Cuántas hay en la ciudad?

El número de Inmobiliarias registradas con Matrícula de Arrendador, que expide la Alcaldía de Cúcuta es de 175. Y ante la Cámara de Comercio, hay 405 inscritas. 

Por su parte, afiliadas ante la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), hay 27 constructoras.

¿Qué tipos de empleo generan?

Según la gerente de La Lonja, las inmobiliarias generan empleos relacionados con la captación de inmuebles y/o clientes, gestores comerciales, administrativos de contabilidad y contratos, y comunicadores, fotógrafos y publicistas gracias al auge de las redes sociales y la necesidad de mostrar tanto los inmuebles como a la empresa por sí misma.

Para el gerente de Monape, las constructoras generan tanto empleos directos (mano de obra) como indirectos (proveedores) porque para llevar a cabo una construcción se necesita una cantidad importante de materiales que ofrecen  diferentes proveedores, siendo este uno de los sectores productivos que más empleos genera en el país. 

¿Cómo reconocer que son legales?

En las inmobiliarias el hecho de hacer parte de una Lonja puede brindarle ciertas garantías al futuro comprador porque para pertenecer a ella se debe cumplir con unos requisitos y entregar una documentación legal como Cámara de Comercio, Rut, Matrícula de Arrendador, entre otras.

¿Cómo reconocer que una constructora es legal?

Debe estar registrada e inscrita ante la Cámara de Comercio de su respectiva ciudad y ante la Dian y debe tener un domicilio donde atender a sus clientes.

Un factor de garantía que no es obligatorio para ser legal, es estar afiliada a Camacol. 

Como parte de tranquilidad para las inversiones de los clientes, las fiduciarias (fiducia de preventas) son un medio para llevar a cabo el recaudo de los dineros mientras el proyecto llega a un punto de equilibrio.

Gustavo Contreras Sabogal | gustavo.contreras@laopinion.com.co