Los diálogos para concertar el aumento del salario mínimo en Colombia están lejos de llegar a buen puerto y al parecer será el Gobierno Nacional el encargado de definir por decreto el incremento para el 2018, tal como sucedió en años anteriores. Así lo aseguró Fabio Arias, secretario general de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).

Aunque al iniciar la semana el Ministerio de Trabajo resaltó la buena disposición de las partes para negociar y ajustar sus propuestas con el objetivo de llegar a una decisión unánime, todo parece indicar que esto no fue más que una ilusión.

Tras la última reunión, Arias indicó que el Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, les había informado que el Gobierno Nacional estaba mucho más cerca de la propuesta de los gremios empresariales, que unificaron el aumento en 5,1%, lo que dejaría el ingreso básico en $775.341.

“Todo hace presagiar que esta vez, al igual que en las otras, el decreto va a ser unilateral, absolutamente lejos de los trabajadores”, precisó Arias, rechazando además los incumplimientos del Gobierno de Juan Manuel Santos con la clase obrera.

El vocero de los sindicalistas, señaló que la propuesta de los trabajadores se mantiene en 9%, con lo que se le apunta a un salario mínimo mensual de $804.112. Actualmente, más de 1,7 millones de colombianos tienen un ingreso básico de $737.117 y la idea de los empresarios es aumentarlo en $37.624 y los sindicatos esperan subirlo en $66.395.

La ilusión de las centrales obreras por obtener lo que ellos consideran un salario justo, termina de hundirse con los resultados de la última encuesta trimestral de expectativas económicas elaborada por el Banco de la República. 

Según los resultados del estudio, el incremento máximo que espera el mercado es del 5,6%. A esto se suma las previsiones hechas por el director de Fedesarrollo,  Leonardo Villar, que recomienda un aumento entre el 4,1% y 4,5%.

Redacción económica