Hoy, vivir en Cúcuta es más costoso que hace un año y eso es porque el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que mide la inflación en la ciudad se ubicó en 2,64 % en lo corrido del primer semestre, es decir 0,90 puntos porcentuales por encima del 1,74 % del mismo semestre del año pasado.

Los indicadores que más han jalonado este crecimiento en los primeros seis meses del año son alimentos, bebidas no alcohólicas y la educación.

En la medición de junio, la inflación de la ciudad fue de 0,37 %, esto equivale a 0,15 puntos porcentuales más que en el mismo mes del año pasado, cuando el indicador fue de 0,22 %.

Mayo fue el mes en donde hubo un mayor incremento en la inflación en comparación con los resultados del año pasado, con un 0,24 % mientras en 2018 el IPC se ubicó en -0,20 %.

El indicador de alimentos tuvo las variaciones más altas en los grupos de gasto en los dos últimos meses, en mayo fue del 0,85 % y en junio del 1,14 %.

A cierre de junio, el indicador se ubica en 7,42 %, mientras que el año pasado era de 1,48 %, esto equivale a que el costo de los alimentos se incrementó en 5,94 puntos porcentuales.

En Colombia, Cúcuta tiene la mayor variación en los costos de los alimentos entre las 23 ciudades principales del país, el promedio nacional se ubica en 5,25 % y en ciudades con mayor población como Bogotá y Medellín, no supera el 6 %, con 5,20 % y 4,58 % respectivamente.

Para Alexander Botello, coordinador del programa de Economía de la Universidad de Pamplona, la presión al alza en alimentos puede deberse a la mayor demanda de alimentos por parte de los inmigrantes venezolanos.

“Esto hace que muchos productos hechos a nivel nacional sean escasos, porque las compañías y fabricantes de estos bienes no han logrado adaptarse en corto plazo a la mayor demanda y su capacidad instalada es insuficiente”, explicó.

Lina Iscalá, gerente del Observatorio Económico de la Cámara de Comercio de Cúcuta, dijo que por el momento la inflación está dentro de los términos manejables en las proyecciones del Banco de la República.

“La inflación de la ciudad está en los rangos proyectados, Cúcuta ocupo la posición número 12 y estuvo cerca de la media nacional que es 2,71 %”, explicó Iscalá.

Para el primer semestre, hay seis ciudades que tienen un IPC acumulado que supera el 3 %. Montería con 3,28 % y Medellín con 3,25 % son las capitales con mayor inflación en lo corrido del año.

Por otra parte, son nueve ciudades con un IPC acumulado superior al promedio nacional y Bucaramanga tiene el mismo indicador de inflación que Cúcuta, de 2,64 %.

Esto evidencia que ambas ciudades están sufriendo por causa del fenómeno migratorio y el aumento de la demanda de productos.

Botello advirtió que “si todo sigue como va, es decir, siguen aumentando el número de inmigrantes en la ciudad, los precios de los alimentos en los próximos meses podrían seguir presionando al alza los precios de la ciudad”. El economista aseguró que todo dependerá de la rapidez de respuesta del sector productivo a este fenómeno.

Por su parte, Iscalá consideró que el empuje que le dan los inmigrantes al comercio es importante para mover este sector y agregó que el fenómeno del abastecimiento de alimentos se va seguir presentando este año, pero “este no tendrá un efecto importante en el indicador general del IPC de Cúcuta”.

Educación, más cara

La educación es uno de los indicadores que más ha aumentado, tanto a nivel nacional como en Cúcuta.

En la capital de Norte de Santander este indicador se ubicó en 6,21 %, lo que equivale a 1,09 puntos por encima del 5,12 % del año pasado.

A nivel nacional, este indicador es el segundo más alto, ubicándose en 4,66 %, aunque es bajo en comparación con el primer semestre de 2018, que fue de fue de 5,90 %.

Además, gran parte de las ciudades analizadas están por encima del promedio nacional y Cúcuta es la séptima capital con la variación más alta, indicador que lidera Manizales con 7,13 %, seguida de Cartagena con 6,72 % y Villavicencio con 6,67 %.

Según el Índice de Competitividad de Ciudades (ICC) 2019 de la Universidad del Rosario y el Consejo Privado de Competitividad (CPC), en educación básica, media y superior Cúcuta bajó respecto a los resultados obtenidos en el 2018.

Aunque, la disminución no fue muy alta, del 0,1 % en educación básica y media y del 0,2 % en educación superior, la ciudad tiene algunos indicadores preocupantes.

En la cobertura de educación superior es la antepenúltima ciudad, entre las 23 analizadas, con un puntaje de 0,81; la baja cobertura se presenta principalmente en formación universitaria.

Por otra parte, este índice de competitividad reveló que la calidad de la educación superior de la ciudad es baja, ocupando el puesto 19, con 2,80 de puntaje; y que los docentes son los de menor calidad a nivel nacional (puesto 23).

A pesar de que la educación está aumentando de precio en la ciudad, estos costos aún no se ven reflejados en una mejor calidad, como evidencian los indicadores del estudio de la Universidad del Rosario.

Otro informe, el del Índice Cómo Vamos de Ciudades Universitarias (ICU) 2017 de la Red de Ciudades Cómo Vamos, ubicó a Cúcuta en el antepenúltimo lugar entre 13 ciudades analizadas, solo por delante de Chocó.

Los resultados del ICU destacaban que Cúcuta es una ciudad en donde los universitarios conviven con un bajo costo de vida y un buen ambiente; pero con una baja tasa de empleabilidad y calidad.

Por eso, el aumento en el IPC de la educación afecta los pocos indicadores buenos que tienen las universidades regionales.