La tasa de desempleo en América Latina y el Caribe puede aumentar 2% en 2015, según las previsiones anunciadas por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y por la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

En su informe "Coyuntura Laboral" de la región, la Cepal, con sede en Santiago de Chile, y la OIT pronosticaron que el índice de desocupación este año será de 6,2 por ciento, debido al escenario económico poco alentador.

Ambos organismos afirmaron que la expansión económica para la región, la cual se calcula sea de 1% en promedio, impedirá revertir el proceso de desaceleración iniciado en 2011.  “El estancamiento del producto interno bruto (PIB) per cápita debilitaría la demanda laboral y, por lo tanto, la generación de empleo asalariado", señalaron estas instituciones en el documento.

Se pronostica una caída en la tasa de ocupación urbana (la relación entre la población ocupada y el número de personas que integran la población en edad de trabajar) en la región por tercer año consecutivo.

Además, se espera que el descenso de la participación laboral, ya sea ocupada o desempleada registrada en 2014, no se mantenga con la misma magnitud en 2015, para ubicarse en los mismos niveles de 2013.

"El escenario del mercado laboral que se avizora en el año 2015 no es muy alentador para la búsqueda de progresos sustanciales que ayuden a alcanzar mejoras en términos de pobreza y desigualdad", señalaron Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, y Elizabeth Tinoco, directora de la Oficina Regional de la OIT para la región.

Según el informe, durante gran parte de la década pasada y a inicios de la década actual, la región de América Latina y el Caribe logró importantes avances en la reducción de la pobreza y la distribución de ingresos, en un contexto global que se caracterizó por crecientes niveles de desigualdad.

"Estas mejoras se debieron a las tendencias positivas que mostró el mercado laboral, como la fuerte generación de empleo asalariado y la reducción de las brechas de ingresos laborales", añadieron los organismos.

A ello se sumaron políticas públicas sobre salario mínimo, formalización e inspección, además de la expansión de los sistemas de protección social y de la educación.

En el documento se analiza el desempeño laboral de la región en 2014 y la caída de la tasa de desempleo observada durante ese año, atribuida al comportamiento atípico de los mercados del trabajo en Argentina, Brasil y México, que registraron la caída en sus tasas de participación.

También examina la ampliación de la protección social, al recordar que, desde una perspectiva de derechos, la universalización de esa política es indispensable para avanzar en la construcción de sociedades que tienen a la igualdad como horizonte de estrategia de desarrollo.

La Cepal y OIT coincidieron en que para garantizar el acceso universal al empleo se requiere integrar componentes contributivos y no contributivos en los sistemas de protección social, lo cual conlleva importantes retos, sobre todo en términos de diseño institucional y de financiamiento.