“La contrarreloj es una etapa en la que se gana o se pierde tiempo, no hay otra”, señaló el escalador colombiano Egan Bernal, en la víspera de la única contrarreloj de la presente edición del Tour, 27 kilómetros en el sur de Pau.

 

“Los especialistas tienen todas las de ganar, pueden manejar el ritmo y los watios. Nosotros (los escaladores) tenemos la desventaja, pero intentaremos hacerlo bien, a ver qué pasa”, dijo el ciclista del Ineos tras la primera jornada de montaña en los Pirineos, en la que ganó Simon Yates.

 

“No soy malo, pero no es mi especialidad, tengo muchos rivales, vamos a ver”, añadió.

 

Bernal acabó muy satisfecho con el desarrollo de la etapa, en una jornada en la que los favoritos declararon una tregua y no hubo ataques, con el equipo Ineos controlando el pelotón.

 

“La carrera fue como los equipos que estábamos controlando queríamos que fuera, no había nadie de la general en la fuga, por lo que podía tomar el tiempo que quisiera”, analizó el colombiano de 22 años.

 

Simon Yates se impuso a sus dos compañeros de escapada, Pello Bilbao y Gregor Mühlberger, para adjudicarse la duodécima etapa, de 209 kilómetros y que pasó por los puertos de Peyresourde y Hourquette d’Ancizan.

 

“Obviamente los equipos que van a controlar tienen que aceptar la fuga y así fue”, añadió. 

 

“Era muy previsible que la etapa se desarrollara así. Ningún corredor ni ningún equipo de la general quisieron gastar de más porque saben que hoy hay una contrarreloj importante en la que nos tocará darlo todo”, continuó.

 

Bernal es tercero en la general y su compañero y defensor del título Geraint Thomas es segundo, a 1:16 y 1:12 respectivamente del líder, el francés Julian Alaphilippe.

 

Día clave 

 

A priori, Thomas tiene ventaja en la cronometrada. Bernal intentará limitar daños con su compañero y rival ya que una gran diferencia entre ambos podría establecer definitivamente la jerarquía del Ineos y pasar a ser gregario de lujo del galés.

 

“Una vez disputemos la crono el Tour de Francia será diferente, con más ataques. El sábado es una etapa muy dura, con una subida muy mítica y especial (Tourmalet)”, avisó.

 

“Algunos corredores atacarán porque llegarán con tiempo perdido. De momento, creo que los ciclistas del Team Ineos no necesitamos hacer nada sino correr con inteligencia”, concluyó el maillot blanco de la carrera, que luce como mejor joven de la general.

 

Hoy se disputa la única contrarreloj individual del Tour, con un recorrido por el sur de Pau de 27,2 km, en el día en el que se celebra el centenario del nacimiento el maillot amarillo de líder de la prueba.