Un nuevo contratiempo para Gianni Infantino: con las sospechas de colusión por sus encuentros informales en 2016 y 2017 con el jefe dimisionario de la fiscalía federal suiza de fondo, el presidente de la FIFA fue objeto ayer de la apertura de un proceso penal en su contra.

El fiscal federal extraordinario, Stefan Keller, “abre un proceso penal contra el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y el primer fiscal del cantón de Haut-Valais, Rinaldo Arnold”, principalmente por “abuso de autoridad”, “violación del secreto de función” y “obstaculización de la acción penal”, según el comunicado.

Este anuncio llega una semana después de la dimisión del responsable de fiscalía suiza, Michael Lauber, cuestionado por su gestión del FIFAgate, y sospechoso de colusión con Infantino.

Lauber, entonces a cargo de la investigación sobre el FIFAgate, e Infantino, se encontraron de forma informal en varias ocasiones en 2016 y 2017, levantando dudas sobre una eventual colusión.

El fiscal federal extraordinario Stefan Keller, nombrado a finales de junio para examinar las denuncias penales presentadas contra Lauber e Infantino, pidió que se levantara la inmunidad al primero para poder también iniciar un proceso contra él.

Concluyó que “existen elementos constitutivos de un comportamiento objetable” tras uno de los encuentros entre Michael Lauber, el presidente de la FIFA, y el primer fiscal del Cantón del Haut-Valais, Rinaldo Arnold.

“Cooperar plenamente”

La FIFA anunció después ayer que tomaba nota de la decisión.

“La FIFA, cuyo presidente sigue a la disposición de las autoridades suizas, va a cooperar plenamente en esta investigación, como siempre ha hecho”, explicó la Federación Internacional en un comunicado.

La FIFA nunca ha desmentido los encuentros entre Infantino y Lauber, explicando que estaban destinados a mostrar que la Federación Internacional estaba “dispuesta a colaborar con la justicia suiza”.