Isabella Rojas Chacón es una pequeña de cinco años que perdió la batalla contra la leucemia, pero nunca la alegría de su alma.

Ella nunca supo qué tenía, por qué debía estar visitando a menudo el hospital y la razón por la que se le caía su cabello. Para Isa todo era  un mundo de fantasía que fue creando junto con su familia y su imaginación.

Un castillo que representa un hospital, dragones como simbolismo del cáncer y polvos mágicos que enviaban las hadas que simulaban las quimioterapias, hacen parte de la historia que es narrada en este libro, la cual relata como la princesa Isa derrota a estos malvados seres y finalmente entrega su vida para volver al lugar al que pertenece, el cielo. 

Su tía, Angélica Rojas, en medio del duelo decidió narrar la historia de su sobrina por medio de un cuento fantástico. Con el texto quiere demostrar que el amor puede vencer cualquier obstáculo. 

La princesa Isa y el corazón de cristal es la historia creada por Isabella Chacón y su tía Angélica Rojas.

“Todo nace de la idea de redactar la historia que juntas creamos, fue la misma depresión la que me ayudó a escribir el libro. Empecé en febrero y dos meses y medio después lo había terminado”, contó Rojas.

En el cuento también aparecen dibujos de flores, soles, helados y cupcakes que representan la diversión, la fuerza y la valentía que los ayudó a enfrentar la enfermedad.

“Por su tratamiento, Isa dormía mucho y cuando se levantaba le gustaba dibujar sonrisas, jamás pintó tristeza’’ dijo.

Entre los personajes principales del cuento están todos los seres que hicieron de la vida de Isa algo fantástico y quienes la ayudaron a sobrellevar su día a día de una forma divertida, como lo es su hermano menor, quien le donó su médula ósea como parte del tratamiento y es representado como el príncipe azul. También está su mejor amigo, Dieguito, un niño con Síndrome de Down que conoció en el hospital y que falleció tres meses antes que ella. 

Con el apoyo de los estudiantes de séptimo semestre de comunicación social de la Universidad Francisco de Paula Santander, liderados por la docente Julieth Villabona, se viene liderando una campaña  para encontrar padrinos que apoyen la publicación del libro. Con el dinero recaudado se imprimirán 1.000 ejemplares. 

Los personajes están inspirados en sus amigos y parientes. 

La académica dijo que se busca que los estudiantes pongan en marcha proyectos utilizando estrategias de comunicación, haciendo énfasis en ese tipo de planes y trabajando con acciones que den resultados en beneficio de la comunidad.

“Es importante implementar este tipo de iniciativas en el entorno académico, el componente humano siempre está presente en las actividades diarias y es necesario ser solidarios con aquellos que nos necesitan”, indicó Villabona.

Los recursos que se generen por la venta de los libros didácticos se invertirán en proyectos sociales para beneficiar a las organizaciones que trabajan con niños con cáncer y así contribuir a mejorar sus condiciones de vida.

Para ediciones posteriores se espera tener un capital base para construir ‘La casa rosa’, que funcionaría como un hogar de paso para aquellas familias con niños enfermos que provengan del Catatumbo y de Venezuela, que necesiten hacerse exámenes en la ciudad y no puedan costearse una noche en un hotel. 

Estudiantes de comunicación social de la Universidad Francisco de Paula Santander durante la presentación de la campaña.

El lanzamiento del libro se hará el 20 de noviembre a las dos de la tarde en el edificio SG de la Universidad Francisco de Paula Santander. Se contará con la participación especial de los niños de la Fundación Pequeños Guerreros y se les hará entrega especial de tapabocas sublimados con su héroe favorito, haciendo énfasis en que ellos también lo son.

Para quienes estén interesados y no se encuentren en la ciudad, se creará una página virtual donde se podrá adquirir la versión en formato digital, además de comprar accesorios como botones y afiches.

“La historia está pensada para todos, empezando por los padres de los niños que sufren la enfermedad, como en los propios niños para que se diviertan y aprenden mientras leen”, explicó la tía.

Rojas y su libro dejan un mensaje de reflexión para que todas las personas vean en la historia de Isa el reflejo de algún momento de sus vidas.

“Los sueños se pueden hacer realidad si realmente  existe el empeño y las ganas. Así como nosotros ayudamos a Isa, es necesario hacerlo con todas las familias que pasan por momentos difíciles y necesitan una voz de aliento, esa es y será siempre nuestra meta como seres humanos”, dijo.

Por: Gerson Correa/Practicante de periodismo