Su vida son las artes escénicas. Él actúa, pero también forma a las nuevas generaciones que sueñan con dejar que su talento para la dramaturgia los lleve por el mundo. En el teatro tiene 42 años y la vasta experiencia lo sitúa como uno de los más destacados teatreros del departamento.

Natural de Durania, Carlos Eduardo Carvajal Valderrama dirigió durante varios años el grupo de teatro El Portón de la Universidad Francisco de Paula Santander (UFPS). Fue profesor en colegios y dirigió agrupaciones locales, hasta que se pensionó siendo artista, hecho que califica de meritorio.

Tras alcanzar la pensión, jamás concibió dejar el oficio y creó la Fundación Canta Rana, desde donde promueve el teatro en Cúcuta y forma gratuitamente a las nuevas generaciones que se interesan por las artes escénicas.

Además, el inquieto teatrero, dirige el grupo de la Universidad Libre y está vinculado al de la Fundación de Estudios Superiores Comfanorte (Fesc).

“Con Canta Rana, que está ubicada en la calle 10 norte # 7E-04 de Guaimaral, tenemos a 18 jóvenes que hacen parte del equipo actoral y con ellos tenemos en remojo obras como Tras escena y El juego de Mariela Romero”, dijo Carvajal.

De haber dedicado su vida a lo que lo apasiona, el teatro, dijo que le queda una enorme satisfacción por haber sembrado la semilla de la paz y del arte en Cúcuta, una ciudad donde se ve un incremento en el surgimiento de compañías teatrales exitosas.

Dos de ellas mencionadas por Carvajal son el teatro Manotas en La Libertad y Casa Teatro, en La Cabrera. 

Pese a ello afirma que en la ciudad se necesita con urgencia un Instituto de Cultura, como el que existió antiguamente y donde él se formó como teatrero. “Allí me enseñaron a ser obrero del arte, no como ahora que los actores quieren que les den todo.

Hay que entrenar, para mi actuar es fácil, lo difícil es ser actor, eso requiere disciplina, no trasnochar, no fumar, cuidar la garganta, el estado físico y rodearse de personas que favorezcan el crecimiento como personas”.