Once bibliotecas públicas de Norte de Santander fueron seleccionadas para hacer parte del programa Bibliotecas Itinerantes de la Biblioteca Nacional de Colombia y el Ministerio de Cultura.

Así lo dio a conocer la nueva directora de la Biblioteca Nacional, Diana Patricia Restrepo Torres, quien en diálogo con La Opinión habló de los detalles de este programa y de las metas que tiene al frente de la biblioteca de los colombianos.

La iniciativa de acuerdo con Restrepo hace parte del Plan Nacional de Desarrollo: Pacto por Colombia, pacto por la equidad, en el que se prioriza la importancia de llegar al sector rural con oferta cultural.

¿Cuáles son los antecedentes de Bibliotecas Itinerantes?

Se hicieron análisis que arrojaron la necesidad de ampliar la cobertura al campo y se diseñó un programa que beneficiará a 600 bibliotecas en cuatro años. Se lanzó la convocatoria y se postularon 266 bibliotecas, escogiéndose las primeras 150 a intervenir. En este grupo están 11 de Norte de Santander, una región con diversidad en el oriente colombiano.

¿Cuáles son las bibliotecas escogidas?

Están las bibliotecas públicas de Bochalema, Chitagá, Convención, Hacarí, Lourdes, Mutiscua, Pamplonita, Ragonvalia, Salazar, San Calixto y Toledo. En su orden, estos entes culturales harán labor de extensión en las zonas rurales de La Donjuana, Tane, El Guamal, San José de El Tarra, Corozal, La Laguna, El Diamante, La Unión, Carmen de Nazareth, Potrero Grande y San Isidro.

¿Qué recibe cada biblioteca?

Se entregarán maletines con colecciones literarias, mínimo 70 títulos por morral. Además, un kit tecnológico para que en cada municipio se recupere la memoria, en las zonas rurales hay un componente de oralidad alto y la meta es que con grabadoras periodísticas y cámaras de video se registren los testimonios. También hay proyectores y tabletas.

¿En qué mes se entregan estos beneficios?

Estamos organizando unas jornadas de capacitación previa con los bibliotecarios y esperamos que en agosto se inicien los recorridos por los territorios. Para septiembre se proyecta la entrega de los kits, con el acompañamiento de tutores. 

¿Los maletines se irán rotando entre familias?

El funcionamiento de cada biblioteca itinerante lo definirá la comunidad con el bibliotecario. Es importante destacar que hay un incentivo para el traslado del maletín, por ejemplo si la comunidad de San Isidro en Toledo propone que sea en bicicleta, así se hará.

¿El programa refuerza la lectura en familia?

Queremos llegar a las familias campesinas, quienes podrán acceder al material de Leer es mi cuento. La apuesta es que el Estado cubra todo el territorio nacional y las comunidades se sientan incluidas. A nivel país esperamos que en cuatro años se cubra 12.000 familias y también se tiene previsto formar a 1.800 líderes comunitarios.