Como si se tratara de un rompecabezas, vándalos vienen desbaratando el parque Cúcuta 300 Años, que les costó a los cucuteños 8 mil millones de pesos.

De las risas y gritos de alegría de los niños que llegaban todas las tardes y noches a disfrutar del lugar, especialmente de su fuente, hoy no queda nada, ni luces, pues el parque permanece a oscuras. Aun así, algunas personas se arriesgan a llevar a sus hijos.

Recién se inauguró, en diciembre de 2014, a los pequeños no les importaba irse empapados a casa, pero, hoy, las aguas fétidas amenazan con provocar enfermedades en la piel y el intestino.  

Para los vecinos, en las madrugadas y por las noches hay vándalos e indigentes que se bañan en las fuentes y se llevan partes de los aparatos biosaludables.

La Opinión visitó el lugar y encontró que se están robando hasta las tablas del mobiliario. 

Las llaves que regulan la salida del agua a chorros están desajustadas, y todo está lleno de colillas de cigarrillo, jabones y basuras que se quedan estancadas. 

Las luces de la fuente de colores están apagadas y los 53 chorros de agua, que alcanzaban 15 metros de altura, no funcionan.

Según Margarita Rincón, personas sin escrúpulos estarían bañando perros en la pileta, por lo cual recomienda que los papás no dejen que sus hijos se mojen allí.

Lo mismo propuso la secretaria de Salud, Judith Ortega,  quien dijo que no es para nada recomendable que los niños utilicen el agua del parque. Además, reprochó a los papás que lo permiten, pues si bien la Alcaldía debe responder por la salud, los padres son definitivamente los que deben velar por la protección de sus hijos. 

“Revisaremos qué está pasando, pero ninguna pileta está hecha para que alguien se bañe ahí”, precisó. 

El secretario de Gobierno, Óscar Gerardino, dijo que desde ningún punto de vista está permitido que la gente se bañe en las piletas del parque y llamó la atención de la empresa de seguridad Eagle, que se encarga de vigilar el lugar.

“El parque se construyó con la finalidad de que los padres y sus hijos se divirtieran con los chorros de agua, pero de eso a que se metan en las fuentes es prohibido, porque puede ocurrir un accidente”, dijo Gerardino. 

El secretario instó a la empresa de vigilancia para que aclare qué es lo que se ha perdido y para que no permita que indigentes ni animales se bañen en las aguas estancadas.

“No podríamos decretar que la gente no vaya al parque, porque nuestra finalidad es que sí lo hagan, lo que  pretendemos es que hagan buen uso de este espacio y lo cuiden, porque es de todos”, dijo Gerardino. 

Sobre los daños provocados por los vándalos, el secretario de Planeación, Orlando Joves, indicó que a la empresa que hizo la obra se exigirá el cumplimiento de las pólizas. 

Otro de los daños que se observó en el parque es que se están presentando filtraciones en la placa del piso, lo cual ha generado que algunas zonas secas como el parqueadero, tengan problemas.

“Le pido colaboración a la ciudadanía para que ayuden a proteger el parque, porque los vándalos aprovechan el momento de descuido para robar y para dañar”, indicó. 

Las filtraciones pudieron detectarse con las lluvias, dijo Joves, y aseguró que se estudia la manera de entregar el parqueadero en concesión.

El parqueadero del parque Cúcuta 300 Años no ha prestado el servicio esperado, pues allí se pueden parquear unos 250 vehículos.

El parqueadero no ha sido usado, ni siquiera cuando se ha puesto gratis, porque la gente no se arriesga a dejar sus carros si no hay quién vigile, por temor a que lo desvalijen.

La alcaldía espera hacer el amueblamiento de este lugar y de otros en la ciudad, dijo Joves.