En una cadena de afectaciones ambientales se convirtió la indiscriminada tala de aproximadamente 200 árboles diarios en los bosques de Cúcuta, con el fin de producir carbón vegetal, utilizado en su mayoría en los restaurantes.

Esta práctica ilegal ha sido descubierta por el grupo de Policía Ambiental y Ecológica (Gupae) de la Policía Metropolitana de Cúcuta, en la vereda El Pórtico, Oripaya, en inmediaciones del relleno sanitario, el corregimiento Urimaco y El Zulia.

“Hacen una tala selectiva de árboles, luego abren un hueco en medio del bosque, los meten picados, los tapan con tierra y hierba seca y les dejan un acceso o hueco para meterles candela y así producen el carbón”, dijo un uniformado de la Policía Ambiental.

El proceso puede durar hasta quince días, para posteriormente comercializar este carbón que es utilizado en los asaderos.

El uniformado del Gupae aseguró que esta producción ilegal del carbón afecta el bosque, la fauna silvestre, el agua, el aire y los afluentes hídricos que son contaminados con los residuos de esta práctica.

Entre los tipos de árboles que son talados están el Urapo, Chiminango, Cují y el Cañaguate. Una de las características de estos árboles de los bosques secos tropicales es que no superan los 7 metros de altura pero son expansivos hacia los lados.  

Capturas

La Policía Ambiental y Ecológica aseguró que el año pasado fueron capturadas siete personas por los delitos de daños en recursos naturales e ilícito aprovechamiento de los recursos naturales renovables, al ser sorprendidas cometiendo esta práctica.

Los detenidos quedaron a disposición en ese momento de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de la Fiscalía y además, fueron sometidos a sanciones de 1 a 2.500 salarios mínimos legales vigentes mensuales.

En otro operativo, en Oripaya, los uniformados hallaron cuatro motosierras en medio del bosque, cuando llegaron a capturar a unas personas que estaban talando los árboles. Sin embargo, los sospechosos huyeron del lugar.

Entre tanto, otras cinco personas fueron detenidas en Cúcuta cuando transportaban el carbón vegetal con el fin de comercializarlo.

Según un uniformado del Gupae, para producir un bulto de carbón vegetal, las autoridades aseguraron que en Cúcuta existen 300 asaderos, por lo que invitaron a los representantes de este gremio a que se verifique la procedencia del carbón que utilizan para no contribuir con el daño al medio ambiente.

No obstante, la continua tala de árboles genera alarma por el riesgo de extinción de los bosques tropicales en Cúcuta y el área metropolitana.

Por otro lado, la Policía Ambiental aseguró que también existen minas de carbón legalmente establecidas bajo las normas que exige la ley, que producen carbón mineral, por lo que cuentan con el respaldo de las autoridades ambientales.