Esta vez el turno fue para los ramales que hay en el Parque Simón Bolívar, donde los habitantes denuncian un avanzado deterioro de los urapos a causa de su vejez.

El Parque, que actualmente es el hogar de un nido de loros, iguanas, gavilanes y termitas, cuenta con varias especies de árboles como almendrones,  gallineros, cachuelos, mangos, mamones, oitís, palmas y pinos.

El jardinero, Ángel María Cañas,  dijo que hay siete árboles más de la especie urapo y gallineros, a punto de caerse por el debilitamiento de la edad y un nido de termitas.

Habitantes del sector dijeron que se le informó de la situación a la Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental (Corponor) desde hace dos años, pero, al parecer, no han hecho un solo plan que reemplace los que se están cayendo.

Cañas dijo que en los 16 años que lleva trabajando, se han sembrado dos oitís, varios pinos, y algunas palmas, y que Corponor al manifestarle la situación la comunidad, solo ha ordenado que les corten los gajos a los árboles viejos.

La misma situación se presenta en otros sectores de la ciudad, dijo José Rojas, habitante del sector, quien señaló que además el pozo que se encuentra en el subsuelo del parque tiene la motobomba dañada dificultando las labores de riego.

“Yo tengo de vivir acá el mismo tiempo que tienen los árboles del parque, así como tienen vida útil también se mueren, necesitamos que la nueva administración haga algo al respecto” dijo una vecina de la comunidad.

Al respecto, la exsecretaria de Planeación, Miryam Amparo Díaz, dijo que intentó implementar un trabajo de mantenimientos y embellecimiento de los árboles con la empresa Aseo Urbano, sin embargo, la comunidad denunció las podas y las talas de los árboles viejos, por lo cual la procuraduría ambiental ordenó la suspensión de estos trabajos y desde entonces no se ha vuelto a cumplir un plan para proteger las especies.

Expertos en taxonomía vegetal y silvicultura como Evaristo Carvajal, señalaron que es urgente que se haga un registro de los árboles pues no solo se han contado 3.700 en la comuna 1, de ellos 700 están enfermos.

La Opinión