El trabajo que emprendió la Policía Ambiental con el apoyo de 12 jóvenes cívicos del barrio San Luis, apunta a rescatar y conservar uno de los patrimonios con que tiene el sector: la laguna.

Por años, este cuerpo de agua ha permanecido sin dolientes ante la mirada cómplice de vecinos y autoridades, pese a que es considerado uno de los patrimonios ambientales de la ciudad, por su belleza y por su localización estratégica.

La misión es devolverle el brillo y el atractivo que con el paso de los años ha perdido la laguna, dijo Amaury Aguilera López, jefe seccional de protección y servicios especiales de la Policía.

Para ello, el trabajo está apoyado en 12 jóvenes estudiantes del grupo juvenil Guardianes del turismo, que fueron capacitados en el cuidado de monumentos y de sitios como la Laguna de San Luis, convertida en los últimos años en basurero.

De hecho, en la brigada de limpieza que se llevó a cabo en días pasados en este cuerpo de agua y sus alrededores, en el marco del programa Quiero mi ciudad, valoro mi patrimonio, se extrajeron de las aguas muebles viejos, tablas, bolsas plásticas, botellas, cajas de cartón y hasta ropa vieja, elementos que habían sido arrojados al lecho de la laguna por los vecinos del sector.

Aguilera señaló que durante la jornada de limpieza se hizo hincapié a los jóvenes guardianes en la necesidad de que ellos continúen velando por la conservación de este patrimonio de los cucuteños.

Acción similar se llevará a cabo también con los demás monumentos y atractivos turísticos de la ciudad, como El Malecón, la Virgen de Fátima, el Cerro Jesús Nazareno, Pozo Azul, el Parque Playa, entre otros.

Los vecinos le pidieron al alcalde, César Rojas, apersonarse de este potencial sitio turístico, invirtiendo en su recuperación.

Allí se requieren zonas verdes, mobiliario para el descanso, iluminación, entre otras cosas, dijo Ana Francisca Pérez, vecina del lugar.