Papás y profesores de niños del colegio Eustorgio Colmenares Baptista enfrentan un dilema.

No saben qué es más peligroso para los niños: si usar el viejo y oxidado puente peatonal que tienen en la avenida Panamericana o cruzar por la calzada, a riesgo de que los atropelle un carro.

Hace tres meses murió un estudiante de sexto grado, recuerda Olivia Granados Granados, rectora encargada, que siente comprometida la seguridad de 2.300 niños.

Según ella, los niños que salen del plantel a veces suben por el paso elevado, pero allá arriba también corren peligro, porque las mallas de seguridad están deshechas.

Los niños son inquietos, siempre corren y alguno puede caer, dice la rectora.

“El peligro es que algún día pase otra tragedia aquí, en la vía Panamericana, donde pasa el tráfico pesado de la ciudad”, dijo.

La estudiante Angie Sánchez calificó el paso elevado de temerario, por la inseguridad.

“Da miedo pasar por este puente, porque también están atracando”, explicó.

Para la comunidad, es necesario que la Policía haga presencia, cuidando el tráfico y defendiendo a los niños de los pillos.

La falta de señalización es otro riesgo, dado que no se demarcó cuál es la altura máxima de los vehículos que pueden pasar bajo el puente.

Según Doris Santiago, quien vive en el sector, los vagones de carga de los camiones han chocado varias veces contra este paso, dañando la estructura.

Algunas láminas galvanizadas del puente están levantadas por los choques y eso es un peligro para quien necesite pasar entre el colegio y los barrios Salado parte alta, Las Cumbres y otros.

Papás se unen

Según la rectora, inicialmente se conformó un grupo de niños patrulleros para coordinar la subida de los niños al puente, pero como la estrategia no surtió el efecto deseado, ahora los papás y los vecinos del sector ayudan a poner conos.

“Tenemos un papá que usa una paleta de pare para que los niños pasen, pero todos los días es un desorden y los niños pasan por donde se sienten más seguros”, dijo la rectora.

Según el secretario de Tránsito, Carlos Villadiego, se necesita que la comunidad los contacte directamente para poder trabajar en conjunto y ver qué podemos hacer por arreglar esta situación.

La alcaldía revisará la seguridad vial en el colegio y verificará si se puede incluir esta carretera entre los 900 millones de pesos que tiene el Área Metropolitana para señalización de vías locales.

Puentes que generan peligro

Como el puente de la avenida Panamericana, hay otro que presenta graves daños en la primera Etapa de Atalaya.

Según la secretaría de Infraestructura, se están invirtiendo 100 millones de pesos en el puente peatonal Atalaya, pero también se está pensando en el puente en mención.

“El alcalde está priorizando para el presupuesto del año entrante arreglar el paso elevado de El Salado”, dijo.