Cada vez que debe acudir al supermercado o al centro a hacer diligencias, Juan Isabel González, 55 años, madre de cuatro hijos, debe caminar.

Lo hace en medio de difíciles condiciones de movilidad, debido a que el camino que les corresponde a los peatones se encuentra invadido por carros y motos que ofrece a la venta una concesionaria que funciona cerca de su casa.

Ella vive en la avenida tercera del barrio San Luis, a dos cuadras de la sede de Tránsito municipal, la entidad encargada de controlar el mal parqueo en las vías.

Los desplazamientos para esta mujer y las cerca de 12 mil personas que se desplazan a diario por la avenida tercera cada vez se tornan imposibles porque en un 90 por ciento el espacio público se encuentra invadido no solo por vehículos sino por muebles, talleres de mecánica, ventas de gasolina en pimpinas, cafeterías, sillas, mesas, vitrinas y hasta materas.

Pero no solo esto, la vía hace parte de un proyecto denominado ‘par vial’ que complementa la avenida segunda de San Luis y que está pensado para desembotellar el tráfico vehicular que avanza de norte a sur y viceversa, el cual dos años después de haber despegado no ha sido concluido por el Área Metropolitana.

La avenida tercera es un completo caos en el tráfico automotor y su espacio público, y de ello dan testimonio González y las demás familias que habitan en barrios como San Luis, Torcoroma, Aniversario, San Martín y Las Chiveras.

“Además de que los andenes están ocupados por carros y mercancías, la calle es un completo desastre debido a la gran cantidad de zanjas que han quedado de los trabajos de reposición de tuberías de acueducto. Corre uno el riesgo de quebrarse una pierna”, dijo González.

Una solución a esta problemática que denuncian los vecinos de la vía, empero, no está a la vuelta de la esquina como se creía.

El director del Área Metropolitana, José Gabriel Román, le dijo a La Opinión que para pavimentar la avenida tercera no hay presupuesto.

Esto quiere decir que las dificultades para la movilidad continuarán.

“Dar la solución quedó para la próxima administración y lo que se espera para lo que resta del año es hacer un reparcheo menor en los sitios más críticos.

Román anunció que del sitio Cuatro Vientos hasta la glorieta de San Mateo se va a instalar un separador provisional para dar orden al flujo automotor que se desplaza por allí.

Dijo que el proyecto en este tramo comprende la construcción de un separador que empalme con las avenidas 2 y 3, además de los cambios de sentido vial que se requieren para acabar con el trancón diario que se forma en este sector.

León Anastacio Vargas, presidente de la junta de acción comunal se mostró sorprendido ayer por la noticia de que no hay presupuesto para pavimentar la avenida tercera, “algo que nos habían prometido hace dos años”.

La avenida tercera lleva más de 15 años sin recibir mantenimiento.