Varias quejas se escucharon ayer en el Concejo de Cúcuta en relación con la internación de los vehículos venezolanos, dada la incertidumbre por el futuro de estos automóviles pues el decreto 2229 está vigente y debe ser acatado.

Para el concejal Carlos Camero la situación es preocupante porque “si bien es cierto, hay algunas acciones que se han adelantado por parte de la administración, así como otras individuales para la derogación o modificación del decreto, el decreto sigue vigente”.

Además, señaló que hay propietarios que quieren avanzar en el proceso y contribuir con la ciudad, “pero hay una limitante, y es que no han podido registrar la revisión de la legalidad del vehículo, porque quien debe registrarlo es la persona que figura en el título y la mayoría tiene un documento de compraventa expedido en Venezuela, o en Cúcuta”. 

Aunque afirmó que ese aspecto ya es de conocimiento del alcalde César Rojas, enfatizó en que la administración debe estar atenta a estas novedades y pidió conocer si el sistema ya está ajustado.

En desarrollo de la sesión se dio a conocer que pese a que se ha hablado de mesas de trabajo para definir lo que ocurrirá con la internación, la corporación no ha sido invitada a ningún encuentro, y apenas se conoce que la secretaría municipal de Hacienda está consolidando la información que de manera voluntaria aportan los conductores, para generar una base de datos.

Por su parte, el concejal Juan Felipe Corzo cuestionó que sigan pasando carros venezolanos por las trochas, pues se estarían viendo carros último modelo circulando por la ciudad, mientras que el concejal Juan Capacho señaló que se espera que el presidente Iván Duque cumpla una de sus promesas de campaña: la derogatoria del decreto. 

Aunque en la corporación se habló de las posibilidades de modificación o derogación del decreto, Camero conminó a sus compañeros a no dejar abierta la posibilidad “de que parece que lo van a derogar, sino decir (a la comunidad) que por lo pronto el decreto está vigente y hay que cumplirlo”, pues hasta ahora no hay más certeza que esta.