“El ministro de Vivienda, y las autoridades en Cúcuta que tienen que ver con la ayuda a los damnificados por el invierno 2010-2011 nos piden que denunciemos a los avivatos que se quedan con las casas gratis, pero los estamos mostrando y nada pasa”.

La denuncia es de Martha Cañas, damnificada del fenómeno de La Niña en el barrio San Rafael, quien delató con nombres, apellidos y cédulas a varias familias que se beneficiaron con las casas gratis, según ella, sin serlo.

Cañas entregó a Metrovivienda, a Fonvivienda, al Fondo de Adaptación y a la Red Reunidos una lista con los nombres de más de 10 familias, pero insiste en que todo quedó impune.

“Tenemos el caso de César Augusto Becerra Pabón, a quien le dieron vivienda sin haber sufrido daño alguno, porque sigue viviendo en casa de la mamá”, dijo Cañas.

Explicó que Becerra ni siquiera es dueño de la casa por la cual fue inscrito como damnificado, lo mismo que su hermano Luis Alfonso Becerra Pabón, que se quedó con otra casa en Cormoranes.

“He denunciado desde el año pasado que el gobierno les dio casas a muchas personas que no son damnificados, apoyados por el ingeniero Carlos Cáceres, del Clopad y la presidente de la junta de San Rafael, Cecilia Rico, pero parece que el gobierno se hizo de oídos sordos”, dijo esta damnificada, quien no ha recibido casa por un error.

Según el director de Fiscalías en Norte de Santander, César Rojas, el organismo investiga estos hechos y hará seguimiento para determinar si se burló la ley.

Metrovivienda, aclaró que el listado de personas entregado por Cañas se remitió al Consejo Municipal para la Gestión del Riesgo (Cmgr) y al Fondo de Adaptación, para que verifiquen la denuncia, ya que fue el Cmgr la entidad encargada de certificar a los damnificados. El fondo asignó las viviendas y verificó a quiénes las recibían.

Tubalcail Contreras, secretario de Seguridad Ciudadana y coordinador del Cmgr, defendió su entidad y respondió que el censo para los damnificados no lo hizo el Cmgr, sino el Dane.

“Solo recibimos la orden de contar a los damnificados para que les dieran ayuda humanitaria, más no los censamos”, dijo.

La Opinión preguntó a César Augusto Becerra por qué recibió casa sin ser damnificado y dijo que la merece porque vivía en casa de su mamá cuando ocurrió la tragedia, y que no ha ocupado la casa nueva en Cormoranes porque la está arreglando.

“Sí fui damnificado, porque tengo un hogar y el mismo ingeniero Carlos Cáceres (del antiguo Clopad) me dijo: don César usted métase al programa y yo lo apoyo, le colaboro, porque usted tiene derecho a una vivienda digna... Reciba la ayuda”, precisó.

Cáceres dijo que su trabajo en esa fecha fue solo llenar unas fichas técnicas para atender la emergencia y solicitar ayudas humanitarias: “no casas”.

Carlos Cáceres desmiente versión

Carlos Cáceres, la persona señalada de favorecer a personas que no llenaban los requisitos para ser damnificados, desmintió que ayudó al falso damnificado César Augusto Becerra Pabón y a su hermano: “eso es falso”, dijo.

Aseguró que está elaborando un listado de falsos damnificados para enviárselo al Fondo de Adaptación y a Minvivienda para retirarle a Becerra Pabón el subsidio de vivienda.