Como chimeneas, así describen los habitantes de Cúcuta y el área metropolitana a los buses que prestan el servicio público de transporte colectivo en la ciudad. Señalan que muchos de ellos se pasan por la ‘faja’ las normas de regularización de emisión de gases, denunciando además que no hay un control estricto por parte de las autoridades competentes.

Y aunque los más recientes estudios dados a conocer por Corponor mostraron que la calidad del aire en Cúcuta es buena, no habría que bajar la guardia frente a este tema. Sin embargo, la posición de la ciudadanía e incluso de las autoridades de tránsito y ambientales muestran cierta preocupación sobre las emisiones de gases que a diario contaminan la capital nortesantandereana

Jorge Mayid Gene Beltrán, secretario de Tránsito y Transporte de Cúcuta, explicó que desde el municipio sí se ejerce un control frente al parque automotor pero el que la dependencia no cuente con unos equipos especializados para realizar la medición de emisiones de los vehículos, no les permite inmovilizar carros que incumplan con la norma.  

“La cuestión es que en teoría todo vehículo que esté en la calle cumple con la revisión tecnicomecánica, luego por ese lado el requisito legal está cumplido. Pero, por lo general un vehículo que tiene mal el motor, suele tener mal el resto de componentes para circular. Es allí en donde enfocamos los controles”, comentó Gene Beltrán.

A pesar de las declaraciones del secretario de Tránsito, Ricardo Villamizar, director territorial del Ministerio de Transporte de Norte de Santander, dijo que según registros de un consolidado del 2019 en el departamento al menos el 59% del parque automotor evade la revisión técnico-mecánica y de emisiones de gases, lo que se traduce en una cifra lamentable. Por lo anterior, Villamizar pidió a las autoridades de tránsito ser más estrictos con los controles. 

Por su parte, Jorge Enrique Arenas Hernández, subdirector de Medición y Análisis Ambiental de Corponor, mencionó que según las mediciones hechas en enero, Cúcuta cuenta con una calidad de aire ‘Buena’ cumpliendo con los niveles máximos permisibles de contaminante que lo clasifican en esta categoría.

Sin embargo, Arenas reconoció la realidad en el que está inmersa la ciudad, señalando que los buses de transporte público colectivo representan un agente contaminante, por lo que explicó que según el artículo 20 de la Ley 1383 de 2010 cualquier ciudadano puede acusar ante la Secretaría de Tránsito la placa y empresa del vehículo que transita emitiendo partículas contaminantes realmente mortales. La dependencia tiene la obligación de ordenar a la parte operativa de tránsito, para que compruebe lo denunciado”, precisó el funcionario de Corponor. 

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El Área Metropolitana de Cúcuta, como autoridad competente frente a la movilidad del transporte público colectivo, dio a conocer que desde hace varios meses se viene trabajando con las distintas dependencias como es Tránsito de Cúcuta, Villa del Rosario y Los Patios, Corpornor y la Policía Nacional.

Olga María Figueroa Blanco, subdirectora de transporte del área metropolitana de Cúcuta dijo que se tiene una mesa de todos los actores de tránsito con los que queremos es aunar esfuerzos para adquirir unos equipos de medición de control ambiental. Por ahora se están elaborando los proyectos y la idea es concentrarnos en la promoción y prevención por el cuidado del aire y no en las sanciones.

Afectaciones a la salud

El doctor Saúl Carrillo internista neumólogo, dijo a La Opinión que las partículas contaminantes que emiten los buses pueden presentar a corto plazo  afectaciones en la salud como una respuesta aguda de la vía respiratoria. A largo plazo, se presentará una enfermedad crónica, bien sea la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (Epoc) o la bronquitis, o el deterioro de alguna enfermedad prevalente como es el caso del asma.

“Las infecciones son causadas por virus bacterias u hongos  en su mayoría que pueden afectar el árbol respiratorio y causar un proceso inflamatorio infeccioso, pero lo que si es cierto es que una persona que está expuesta permanentemente a partículas contaminantes, sí está más propensa a desarrollar enfermedades respiratorias porque tiene un árbol bronquial que está comprometido por la exposición permanente a esas partículas”, explicó el neumólogo.