La llegada de un año electoral coincide con la persecución y amenazas a líderes comunales que desde ya están pidiendo a las autoridades más acompañamiento, según dijo Martha Maldonado, vocera de la Federación Comunal de Cúcuta.

“Este año es delicado, porque es electoral, y se pone en alto riesgo a los líderes”, comentó. “Varios dirigentes van a postularse a juntas administradoras locales, concejos, asambleas, e incluso alcaldías, y nos preocupa”.

Por ello, pidieron que se afience el diálogo con autoridades civiles y policiales “para prevenir cualquier ataque a la organización comunal”, para lo cual sugieren, por ejemplo, seguir con la estrategia de activación de padrinazgos que, para el caso de Cúcuta, ha dado resultados.

Maldonado resaltó que, en el caso local, además del apoyo de Gobernación, Policía, Defensoría del pueblo, Alcaldía, organismos internacionales como Mapp-Oea y la Onu, se destaca la madurez de la organización comunal que, pese a sus diferencias, se apoya y defiende cuando hay algún incidente.

Aunque en Cúcuta “han bajado un poco las amenazas”, la lideresa afirmó que en la zona rural y áreas periféricas de la ciudad la situación no ha mejorado, y también mostró preocupación frente a las condiciones actuales de los líderes del Catatumbo.

“Los líderes del Catatumbo no están solos y nos preocupan”, e insistió en que hay un proceso de paz “que hay que activar, que no podemos dejar que se estanque ni que se muera, porque la esperanza es tener nuestros territorios en paz, y esto lo podemos lograr siempre que nos unamos”.