Robar agua es ilegal, tanto como cualquier delito, con sus consecuencias pecuniarias. Por ejemplo, llenar una piscina con agua de la línea de conducción de cualquier planta de tratamiento es un delito.

Esto fue lo que encontró la Policía Nacional y Aguas Kpital en un predio, en el anillo vial de Cúcuta.

El local comercial presentaba atrasos en el pago de la factura hasta por dos años, y reincidencia en reconexiones por el mismo tiempo. La comunidad denunció, y la autoridad llegó. 

Carmen Soto, dueña, fue detenida por los organismos policiales tras la aplicación del nuevo código de Policía, que establece que las personas que estén manipulando la infraestructura de los servicios públicos están cometiendo un delito. 

La pena es tanto para quién hace el trabajo de la conexión ilegal, como para quien lo ordena. 

Soto aseguró que la piscina la llenaba con 20 viajes de carrotanque. “Esa conexión (ilegal) ya estaba. Yo la piscina la lleno una vez al año. Desde julio del año pasado no la lleno”, argumentó.

Ismael Fernández, del centro de negocios de control de irregularidades de Aguas Kpital, explicó que vienen realizando verificaciones en la línea de conducción de la planta Tonchalá, para evitar las conexiones de este tipo. 

“Ya se instauró una denuncia penal, por defraudación de fluido”, dijo. “Estos casos los vemos a diario”.