Parece que la preocupación por la escasez de agua en el Área Metropolitana no afecta a los derrochadores.

La Opinión hizo un recorrido por las zonas residenciales y se concentró en lavaderos de carros y motos que hay regados sin control en la ciudad, encontrando que se gasta agua sin discreción.

En sectores como Niña Ceci, Palmeras, anillo vial occidental, Siglo XXI, Motilones, San José, Belén, Aeropuerto, El Trigal, entre otros, y en Los Patios y Villa del Rosario, proliferan estos establecimientos ilegales.

Según el líder comunal del Alto Pamplonita, Hugo Tarazona, es preocupante que mientras el río Pamplonita sigue bajando su caudal, se siga permitiendo que algunos establecimientos usen a sus anchas el agua.

Jaime González, de Siglo XXI, dijo que algunas personas  utilizan los porches de sus casas para lavar motos.

Los lavaderos ya cuentan con tarifas y ofrecen todo tipo de servicios, incluso, de mecánica automotriz en el espacio público.

“Cobran entre 4 mil y 5 mil pesos, y todos los días dejan las calles llenas de agua, con grasas y jabones”, dijo González. “Creo que las autoridades tienen que mirar mejor esta situación”.

En el caso de Los Patios, el alcalde, Diego González, insistió en que está prohibido usar agua para fines diferentes del consumo humano, para lo cual llamó a la comunidad para que denuncie ante las autoridades a los derrochadores.

“Dispondremos de medidas no solo sancionatorias sino penales, para con las personas que estén malgastando o interfiriendo con la protección del agua y de nuestras dos vertientes que son al quebrada La Honda y el río Pamplonita”, dijo.

Por su parte, la Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental (Corponor) instó a la comunidad a proteger el líquido.

Según Corponor, en Cúcuta solo están al día con todos los requisitos para funcionar como lavaderos 13 establecimientos. Otros 70 que funcionan legalmente, no han renovado sus permisos.

Los lavaderos deben tener un pozo de agua cruda y dos permisos, uno para usar aguas subterráneas, y otro para el vertimiento.

Según el coordinador de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, Anelfi Balaguera, la situación de los ríos del departamento preocupa.

“Tenemos 8 municipios con sequía y no podemos seguir derrochando el agua, de manera que el llamado es a que los centros poblados cuiden y denuncien el malgasto”, dijo.

Entre 5 y 10 lavaderos de carros nuevos nacen mensualmente en la ciudad.  

Según el gerente de la empresa Aguas Kpital, Hugo Vergel,  aunque la empresa no está autorizada para multar a los derrochadores, pidió a la comunidad que denuncie ante la Policía Ambiental para que se sancione con el comparendo ambiental.

*La Opinión