Hace casi tres meses, el diario La Opinión dio a conocer la historia de varios cucuteños con discapacidad que apelaban a la generosidad de la ciudadanía para poder obtener implementos médicos que les ayudara a mejorar su calidad de vida.

Uno de ellos es Gerson Jáuregui Pérez de 59 años, que dada la situación económica que atraviesa, no había podido acceder a un bastón de mando que le permitiera guiarse ya que sufre de una enfermedad genética llamada retinopatía pimentosa evolutiva grave, que le ha causado una ceguera total y su único sustento para afrontar la oscuridad es un palo plástico de escoba.

Sin embargo, su historia hizo eco en el director de la fundación Los Niños Ven con Jaime Parra, quien buscó la forma de contactarse con Jáuregui y entregarle un bastón de invidente que ahora le ayudará a mejorar su calidad de vida al tener mayor seguridad al movilizarse.

Lea aquí: Cucuteños con discapacidad esperan ayuda en Guaimaral

“Supe de la necesidad del señor cuando leí la nota en el diario y logré contactarme con Paulo Becerra, presidente de la Junta de Acción Comunal de Guaimaral, porque también soy presidente comunal. Así que, con la fundación y tocando puertas, hicimos contacto con un fisioterapeuta, Carlos Dávila y logramos conseguir el bastón al señor para que se movilizara mejor”, precisó Jaime Parra.

Infortunadamente, Alexander Sánchez Villamizar quien sufre de parálisis cerebral motora y que está a cargo de su Aracelis Sánchez, aún siguen esperando silla de ruedas junior que se adapte a su cuerpo, porque todavía usa la silla artesanal hecha en tubos de PVC, que es la única a la que tienen acceso y a la que se ha acomodado.