Preocupados. Así se encuentran los habitantes de la Urbanización Los Estoraques de la ciudad de Cúcuta, pues el miedo a salir a las calles ya no es porque se puedan contagiar de coronavirus, sino por la inseguridad que tiene azotada a toda la ciudad, especialmente a este sector, donde la falta de alumbrado ayuda a los delincuentes a cometer sus fechorías sin que corran el riesgo de ser identificados o atrapados. 

“En el día uno anda como con cuatro ojos y en la tarde-noche, esto a uno le da es miedo, porque todo es oscuro y no hay policía. Si roban a los hombres, que podemos esperar nosotras las mujeres que somos más indefensas, además que hay mucho vicioso en la zona”, dijo Lola Torres, vecina del sector. 

Esta situación, debido al robo de las lámparas y el cable del alumbrado público que, según denuncia la comunidad, se ha vuelto una constante, pues los habitantes de la calle y los ladrones se los llevan para venderlos en zonas como La Merced o el parque Lineal. 

A corte del mes de julio, se reportaron 108 luminarias hurtadas, según informó Marcela Rodríguez Camacho, subdirectora de Servicios Públicos del Departamento de Planeación Municipal. 

La Avenida Los Libertadores, Prados del Este, Tasajero, el Canal Bogotá, el barrio Santander y la zona céntrica de la ciudad, son los lugares donde mayor hurto de luminarias se presentan. 

La Secretaría de Seguridad Ciudadana informó que están adelantando intervenciones por distintos lugares de la ciudad, en articulación con la Policía Nacional, por lo que le piden a la comunidad denunciar estos actos, a fin de acabar con la delincuencia.