Lo primero que hace cada vez que sale de su hogar rumbo a la planta de tratamiento de Aguas Kpital Cúcuta, en El Pórtico, es encomendarse a Dios, “como buena cristiana”, porque “es difícil no llenarse de nervios” ante la pandemia de COVID-19.
Así lo aseguró la microbióloga Diana Yajaira Mantilla, quien es una de las responsables de velar por la calidad del agua, indispensable para la vida y especialmente ante la crisis sanitaria generada por el coronavirus.
En esta emergencia, no solo el personal del área de la salud le está poniendo el pecho hasta esa “guerra” contra un enemigo invisible, también hay héroes anónimos de otros áreas que en Norte de Santander le están haciendo frente a la situación para hacer que esta sea menos caótica.
Aunque no están en la primera línea de contagio, los trabajadores de las empresas de servicios públicos, quienes cumplen una labor importante, también están expuestos al riesgo al no cumplir la cuarentena nacional ordenada por el presidente Iván Duque.
Por estos días, Diana Mantilla pasa nueve horas o más en el Laboratorio de Ensayos de Aguas Kpital, en donde a cada muestra tomada de los ríos Pamplonita y Zulia le hacen cuatro análisis microbiológicos y 18 fisicoquímicos.
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Allí desarrollan el control de calidad al recurso hídrico que la empresa les envía a los usuarios, el cual se hace en cada una de las etapas del proceso, desde que el líquido se toma de la fuente de captación hasta que llega a las casas mediante la red de distribución.
“Dan nervios, se pone una a pensar muchas cosas debido a esta emergencia. Pero esta es mi profesión y estoy haciendo lo que más me gusta; todas esas ideas pasan un poco desapercibidas, cuando está haciendo su labor con amor, con compromiso, con entrega y con sentido de pertenencia”.
Para la microbióloga, sus principales miedos son que la crisis se agrave, se vuelva incontrolable, y que llegue a contagiarse de COVID-19, pudiendo también infectar a su esposo e hija de 18 años, con quienes vive en su hogar.
Sin embargo, Mantilla sostuvo que es su familia la que cada día la mueve a desarrollar su trabajo. “A pesar que la dejo en la casa y salgo a trabajar, con todos los riesgos que implica salir, mi esposo y mi hija son mi fuerza, mi motor, los que me hacen cada día levantarme con más ánimo, para venir al trabo y cumplir con mis labores de la mejor forma posible”.
Con el fin de mantener a sus seres queridos protegidos, Diana Yajaira Mantilla dijo seguir todos los protocolos de seguridad para ingresar a su vivienda, luego de una jornada laboral; se quita los zapatos, los desinfecta con alcohol y los deja en el garaje, luego pasa directamente al baño, para desvestirse y ducharse.
“Después de todo eso saludo a mi familia. Antes, cuando llegaba, lo primero que hacía era darles un abrazo y un beso, pero ya no se puede y se siente ese distanciamiento al que no se está acostumbrado”, afirmó.
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La microbióloga de Aguas Kpital aprovechó para pedirles a los habitantes de Cúcuta y del resto de Norte de Santander que “por favor” se queden en sus casas y acaten las recomendaciones del Gobierno Nacional.
“No salgan, a no ser algo estrictamente necesario. Si de verdad se aman y aman a los suyos, cuídense”, solicitó Diana Yajaira Mantilla, una de las profesionales que vela por la buena calidad del agua que reciben los más de 187.000 usuarios.
