Por lo menos 30 barrios y asentamientos irregulares están en la mira de la oficina de Gestión del Riesgo de Desastres Municipal, por razón de la temporada de lluvias.

Tucunaré, barrio que lleva 26 años desmoronándose, fue el primero en recibir la visita de Félix Muñoz, coordinador de Gestión del Riesgo.

Durante la inspección se corroboró que 44 familias se reasentaron en los predios catalogados como de alto riesgo entre 2010 y 2011, por lo que Muñoz, acompañado de Óscar Gerardino, secretario de Gobierno, invitó a las familias a dejar la zona.

Muñoz aseguró que los predios visitados harán parte de un  proyecto de mitigación del riesgo con vetiver, que prepara el municipio en busca de financiamiento nacional.

“El proyecto vale 8 mil millones de pesos”, dijo. “Buscamos que el Gobierno Nacional aporte unos 4 mil”.

El funcionario dijo que Gestión del Riesgo está en  fase de prevención y preparación para evitar que las lluvias afecten a más familias.

San Rafael es otro sector priorizado por su alto índice de riesgo. Allí se gestionará un auxilio nacional para construir muros de contención por 9 mil millones de pesos.

También están incluidos Virgilio Barco, Doña Nidia, San Rafael, Tucunaré, Belisario, Sabana Verde, 5 de Mayo, Transversal 17, Loma de Bolívar, Gaitán parte alta, Barrio Bogotá, Antonia Santos y La Ermita, entre otros sectores.  

Carlos Cáceres, de Gestión del Riesgo, explicó que los deslizamientos ocurren por falta de planificación técnica a la hora de construir.

“Además de los barrios que están en alto riesgo desde hace varios años, los asentamientos irregulares se suman a la lista de riesgo, por que la gente urbaniza los terrenos sin ningún tipo de estudio técnico, lo que hace que el terreno empiece a ceder”.

Esta situación se ha presentado en El Talento, La Fortaleza, y Guadalupe y La Conquista, donde se vieron afectadas 163 familias, tras las lluvias registradas el 25 de febrero, y los días 2, 3, 6, 13, 17 y 22 de abril; otras 30 familias están bajo monitoreo constante.

Cáceres aseguró que en lo corrido de 2016 solo una familia ha salido damnificada luego de que su casa en el barrio Cundinamarca colapsó.

Villa del Rosario tampoco es ajena a la afectación por la lluvia.

Aida Castaño Cárdenas, secretaria de Planeación, dijo que el municipio traza un mapa de riesgos de deslizamientos para trabajar en estrategias y proyectos que permitan mitigar el peligro.

Los sitios de mayor afectación por lluvias son: Antonio Nariño, Navarro Wolf, La Esperanza, Turbay Ayala, y 1 de Mayo.

Cárdenas dijo que el año pasado el municipio realizó obras de mitigación de riesgo en Antonio Nariño y el 20 de Julio. Frenaron los deslizamientos con gaviones.

En Los Patios, también están en fase de inspección. Miryen Ramírez, secretaria para la Gestión del Riesgo, dijo que se priorizó a Llanitos parte alta, Balcones de la Esperanza, El Mirador y parte de Videlso.

La Opinión