Durante más de una década, los vecinos de Prados del Este esperaron con ansias tener un parque bonito y canchas dignas para que sus hijos practicaran deporte, descansaran y se recrearan.

Ese sueño se les hizo realidad el año pasado, cuando la alcaldía construyó dos canchas, una de fútbol, y otra, sintética, para minifútbol, con sus encerramientos.

Asimismo, un óvalo para patinaje infantil y, lo mejor, un parque en medio del bosque que hay allí.

Las obras fueron entregadas el 26 de diciembre con mobiliario, iluminación y sistema de riego, para garantizar la seguridad y el mantenimiento.

Sin embargo, los dirigentes y los vecinos del barrio aseguran que de nada vale tener parque y canchas si no pueden utilizarlas.

Jairo Barrera, presidente de la junta comunal, dijo que no han podido establecer quién está a cargo de los escenarios deportivos.

“Solo vemos que llegan, abren las puertas, juegan y luego cierran con candado y apagan las luces, porque quien administra también tiene llaves del alumbrado”, precisó el dirigente.

Aseguró que cuando fueron a pedirle las llaves de los escenarios al anterior director del Instituto Municipal de Recreación y Deportes (Imrd), Ricardo Ramírez, fueron remitidos a un particular que nada tiene que ver con la junta.

“Es insólito que nos hayan construido escenarios, y que gente de fuera de nuestro barrio sea la que administre y nos diga cuánto tiempo y cuándo pueden los niños jugar”, lamentó Barrera.

José Pertuz, vecino del parque, denunció que han intentado regar las zonas verdes del parque, porque se están secando los árboles, pero tampoco pueden, porque los transformadores que activan el riego están bajo llave, al igual que el alumbrado de los escenarios.

Barrera sostuvo que el Imrd piensa entregar la administración de los escenarios de Prados del Este a un club que tampoco es del barrio, lo cual desconoce de plano la autonomía comunal.

Dijo que lo que se pretende hacer con los escenarios es lo mismo que si trajeran a un funcionario de Medellín a administrar el Imrd, como si en Cúcuta no hubiera profesionales idóneos para hacerlo.

Vecinos prometieron llevar el caso a todos los órganos de control para que se repete la autonomía comunitaria y se permita a los niños, jóvenes y adultos hacer uso de los escenarios cada vez que deseen y no cuando otros quieran.

La dirigencia comunal reclamó que las porterías de la cancha de fútbol quedaron sin instalar y ello impide el uso del escenario.

En la ciudad, no todas las canchas sintéticas que funcionan son del municipio, la mayoría son privadas, sin embargo, frente a los escenarios nuevos que fueron construidos con presupuesto del municipio, se está proyectando un plan para su administración.

*La Opinión