La marcha de las tres centrales obreras de la región, y sindicalistas de los sectores público y privado se centró en un lema: soberanía, paz, democracia, y derechos laborales.

Sin embargo, no fueron los únicos aspectos que se exigieron, pues una de las consignas que más se replicó fue el no pago al impuesto de valorización en Cúcuta que, según Enrique Pertuz, coordinador de la Red departamental de defensores de derechos humanos, “es un impuesto que se cobra por obras que no están consultadas con las comunidades, que no se han iniciado, y que no tiene en cuenta la crisis económica y social de la ciudad”.

“No es justo que el alcalde, en complicidad con los concejales, se tomen el derecho de poner un impuesto, cuando la gente no tiene cómo pagarlo”, agregó Pertuz.

Así mismo, se cuestionó el hecho de que varios contratistas del municipio hayan dejado de recibir sus salarios desde hace meses, situación que había sido denunciada en días pasados por el concejal Carlos Camero.

“Tengo gran preocupación porque las diferentes personas que están contratadas en el municipio llevan dos y hasta tres meses que no les cancelan sus honorarios, e inclusive algunos que están contratados en el Instituto municipal de recreación y deporte”, comentó Camero. “Hay obligaciones contractuales que se deben cumplir”.

Según el secretario de Hacienda, Luis Javier Chaves, si bien ya conocía las denuncias “se debe revisar caso por caso, pero en muchas ocasiones es porque les faltan requisitos”, y declaró que parte de los retrasos se debe a que “buscamos que los contratistas que reciben un pago, un sueldo por parte de la Alcaldía, se encuentren al día y sea un requisito el paz y salvo”, condición catalogada como un abuso, por parte de sindicatos y manifestantes.

Al respecto, Pertuz dijo que deben pagarles a personas que contrataron, pues “se suponía que tenían un presupuesto y no pueden plantear que como no se están pagando impuesto a los trabajadores. Me parece que es una cortina de humo y un mal mensaje de la administración”.

Leonardo Sánchez, directivo de la CUT, reiteró la exigencia al Gobierno Nacional para que la región reciba “un trato preferencial y diferencial”, dadas las condiciones socioeconómicas actuales.

En desarrollo de la marcha también se dio espacio a las delegaciones de los candidatos a la Presidencia, aunque solo participaron las de Humberto de la Calle, Sergio Fajardo y Gustavo Petro, pero pese a que la tribuna quedó abierta para que se dieran a conocer las propuestas a los trabajadores nortesantandereanos, los demás no acudieron al encuentro.

La actividad fue acompañada por la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) con 460 efectivos, según informó el coronel Javier Barrera, quien expresó que la marcha fue más nutrida que el año pasado, con unas 2.500 personas, aproximadamente.