El brigadier general Gustavo Moreno, director de la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa), fue el hombre designado por el presidente Juan Manuel Santos para dirigir la gran ofensiva contra el contrabando en Cúcuta y su área metropolitana.

Moreno ha sido contundente al asegurar que no descansará hasta desmantelar por completo las estructuras criminales que, desde hace años, manejan el tráfico ilegal de gasolina, carne, alimentos, entre otros.

Esta semana se han adelantado dos operaciones, la primera el martes pasado en Puerto Santander, en donde lograron desmantelar el mayor centro ilegal de acopio de hidrocarburos, en el que los contrabandistas almacenaban 4 mil galones. (Lea además Bloqueos y balacera en vía a Puerto Santander)

Anoche, el turno fue para La Parada, en donde se intervinieron al menos 30 establecimientos en los que se vendía mercancía de contrabando. (Lea también Disturbios en La Parada por operativos contra el contrabando)

Moreno habló con La Opinión sobre la estrategia del Gobieno nacional y regional para lograr poner punto final a la larga historia de ilegalidad en el departamento.

Para nadie es un secreto lo que sucede en Puerto Santander, donde operan mafias que  ya están muy arraigadas. ¿Por qué debemos creer que esta vez, la estrategia si va a ser permanente?

Hay un lógica que apunta a lograr una transformación real de la frontera y a aprovechar este momento, en donde estamos próximos a una apertura formal. Lo que buscamos es que cuando eso ocurra, existan condiciones de seguridad ya pensadas, que vengan acompañadas de un componente social, de desarrollo, y que cierre  la posibilidad de que esa realidad que los cucuteños han conocido por años continúe.

¿Qué otros lugares se van a intervenir?

Queremos, a partir de unas acciones operativas sobre íconos históricos de ilegalidad como La Parada, El Escobal, Alejandría, Cenabastos, transformar esa realidad. Queremos mandarles mensajes directos a los que hacen parte del Clan del Golfo y de la banda criminal Los Rastrojos de que Puerto Santander, Cúcuta y su área metropolitana no pueden seguir siendo una opción para que ellos sigan incrementando sus finanzas personales y sus finanzas para la guerra. Aquí podríamos decir que, en un momento determinado, esa cultura de ilegalidad fue patentada por la costumbre.

La frontera lleva cerrada casi un año, ¿por qué no se emprendieron estas acciones antes?

Han pasado casi dos años desde que se creó la primera mesa de trabajo binacional con los venezolanos el 1 de agosto de 2014. En esa mesa se empezó a mirar con lupa el tema de Venezuela, empezamos por atacar las estructuras criminales organizadas que se lucraban del negocio en esta parte de la frontera, pero después de eso esta se cerró y la relación binacional se quedó quieta, aunque por parte de Colombia se ha continuado trabajando en la inteligencia de investigación criminal.

¿Esa Inteligencia ha logrado identificar cabecillas?

Como cabecilla de Los Rastrojos en el área metropolitana de Cúcuta tenemos identificado a Wilfrido de Jesús Torres Gómez, alias Necoclí (ver ‘Cartel de los más buscados); por él ofrecemos 150 millones de pesos de recompensa. En el caso de Puerto Santander, tenemos identificado a un Rastrojo que responde al alias de Vikingo.

En el caso de la operación que adelantaron en Puerto Santander, ¿quiénes eran los dueños de esa estructura de paso de gasolina a través de mangueras con motobombas?

Todo ese contrabando de hidrocarburos que logramos aprehender, más de 4 mil galones guardados en el mayor centro de acopio ilegal de Puerto Santander, pertenecía a dos sujetos: alias Araujo y alias Hernández. Por información sobre estas personas también vamos a entregar recompensas.  

La gente que vive allí rechaza los operativos porque su economía gira en torno al contrabando. ¿Cuál es la estrategia para que la gente decida cambiar de fuente de ingreso?

Es importante que sean las mismas autoridades de la zona, el mismo alcalde, el encargado de liderar esos procesos de reconversión laboral y social y eso se va a lograr con las mesas de trabajo del orden nacional que van a llegar a instalarse en Cúcuta hoy y mañana, con presencia de todos los ministerios. Allí  el alcalde puede llegar a exponer la situación real de la economía y de su comunidad.

¿El alcalde Henry Valero (Puerto Santander) estuvo de acuerdo con el operativo del martes?

El alcalde siempre ha buscado que haya un diálogo previo, pero nosotros no tenemos espacio para eso. Como autoridad no tengo ese espacio en mi agenda porque ese espacio compete ya a una autoridad política y se va a lograr en las mesas de trabajo. El alcalde de pronto no ha sido amigo de estos operativos, lo ha manifestado, porque sabe que la gente vive de eso, entonces él está buscando opciones para que ese tránsito no sea tan traumático.

¿En los fortines del contrabando se aplicará extinción de dominio?

Quiero decirle a esta gente que no exponga el capital que ya ha conseguido, ni que se exponga a una acción de extinción de dominio. Ya iniciamos los operativos en donde, además de decomisar mercancía de contrabando, vamos a iniciar acciones contra los dueños y administradores de estos lugares, pues ellos son conocedores de que algo ilícito está pasando.  Igualmente, de la mano de la Fiscalía, vienen las acciones de extinción de dominio tanto de bienes muebles como inmuebles, me refiero a locales, bodegas, parqueaderos, talleres, fincas, casas, vehículos, motos, carros y camiones que se utilizan para este fin.

¿Cuál es la clave del éxito para que la estrategia esta vez sí funcione?

Que es una estrategia que se compone de varios frentes: el de inteligencia y el de la investigación criminal, pues  hay procesos que ya se han abierto y que se vienen trabajando con  la Fiscalía. La otra línea es la operativa, que tiene que ver con la materialización de acciones como las que ocurrieron en Puerto Santander, donde se articulan capacidades de distintas autoridades, incluidas las fuerzas militares.  El otro punto es el social, que viene siendo liderado por el Gobernador de forma efectiva pues ha logrado volcar el interés nacional en esta zona del país.

En Cúcuta ha habido decepción al ver que las condenas para algunos cabecillas de carteles como el de la carne o el de los datáfonos terminan siendo muy bajas. ¿Cómo lograr alinear a todos los que intervienen para que estos castigos sean ejemplarizantes?

Son los fiscales quienes en últimas deciden, pero esperamos que las decisiones que se tomen en ese contexto especial que se está viviendo en Norte de Santander, sean consecuentescon la necesidad de generar un cambio. No queremos seguir llevando delincuentes a los estrados judiciales para que luego sigan delinquiendo de una manera más perversa.  

¿Las estructuras que ustedes tienen identificadas son colombianas?

Son binacionales. Aquí hay que entender la manera en la que estamos mirando el contrabando. En esta lucha no vamos a mirar una estructura como un todo. De esa manera se atacaron los carteles y lo que pasó fue que se atomizaron y se volvieron estructuras más discretas, dinámicas y más efectivas. Ahora lo que estamos mirando es un negocio criminal que se muestra a manera de empresa criminal. Así mismo, a la inteligencia tradicional le incorporamos el componente de inteligencia financiera, de negocios y de mercados, lo que nos ha permitido ver, por ejemplo, las dinámicas de las empresas fachadas.

¿Cuánto dinero mueve la economía criminal en Norte de Santander?

A nivel nacional hemos desmantelado 21 estructuras que habían generado una afectación aproximada de dos billones de pesos. De esas, en la frontera hemos desarticulado 14. De esas 14, referencio solo una que en un año movía 70 mil millones de pesos. Lo que hay que entender es que el contrabando aquí ha mutado, pues se ha convertido en una mezcla de bandidos de cuello blanco, con conexiones e influencias en altas esferas, y el bandido vulgar de siempre.

La Opinión