En Cúcuta comenzó la tan esperada transformación del alumbrado público con la reposición de las antiguas luminarias de luz de sodio por las de luz LED.

Son en total 50 mil nuevas bombillas las que se tiene planeado instalar, en un paso trascendental que catapultará a Cúcuta como la primera ciudad del país en alcanzar la modernización de este servicio con luz blanca, al mejor estilo de las grandes capitales del mundo.

Este cambio hace parte del proceso que lidera el Consorcio Alumbrado Público San José de Cúcuta y que como está proyectado tendrá una inversión de más de 94.000 millones de pesos.

Las nuevas luminarias en luz LED serán instaladas en todos los barrios de Cúcuta, en un plan que se inició en enero y que se aspira quede listo en su totalidad en diciembre.

La gerente del consorcio, Marcela Quintero, aseguró que el nuevo alumbrado público de la ciudad producirá un impacto no solo ambiental, como quiera que disminuirá los actuales niveles de contaminación (45%), sino en lo urbanístico.

El trabajo previo de planeación, de conocimiento de la red y de los sectores con mayores falencias de alumbrado se inició hace seis meses y en la actualidad se avanza en la instalación en los sectores periféricos y gradualmente se irá avanzando hacia los sectores céntricos de Cúcuta, dijo Quintero.

El Consorcio Alumbrado Público San José de Cúcuta (SJC) explicó que la tecnología LED para alumbrado público tiene múltiples beneficios, tanto económicos como lumínicos y tecnológicos dentro de los que se destaca un menor consumo de energía y una mayor percepción de luminosidad.

En cuanto al consumo se ha probado que estas luminarias pueden llegar a utilizar 45% menos de energía y en cuanto a la luminosidad, el brillo, el índice de reproducción de los colores y la poca dispersión de la luz que tienen hacen que se perciba mayor claridad.

Quintero indicó que el proyecto está pensado para elevar a Cúcuta a los más altos estándares de calidad y eficiencia en materia de alumbrado público, lo cual, desde luego, también posicionará a esta capital como una ciudad sostenible y competitiva en la materia.

De hecho expertos en alumbrado coinciden en que las luces LED son una mejor alternativa que los bombillos de luz amarilla, dado que duran más y se puede graduar su intensidad de acuerdo a la necesidad de cada espacio. Quintero dijo que el cambio que tendrá la ciudad en las noches también está pensado para brindar calidad de vida a los cucuteños en materia de seguridad.

El proyecto, explicó la gerente del Consorcio Alumbrado Público San José de Cúcuta (SJC), también le apunta a transformar espacios abandonados, los cuales por décadas permanecieron sin este servicio, y si alguna vez lo tuvieron en la actualidad están destruidos y abandonados, con postes a punto de desplome y con redes obsoletas.

“También nos encontramos con parques en los que solo la mitad del escenario cuenta con red de alumbrado, la otra mitad está a oscuras”, reveló Quintero. O con parques en los que no existe ninguna conexión para este servicio, dijo. 

Dentro de la programación establecida por el Consorcio Alumbrado Público San José de Cúcuta, los obreros avanzaban esta semana en la instalación de luminarias de lus LED en el barrio Panamericano. 

Sentido de pertenencia

En este sentido, un primer llamado a la comunidad es a mantener la calma y a no desesperarse por el servicio, porque el nuevo alumbrado ya empezó a instalarse y hay una programación definida para todos los barrios.

Un segundo llamado es a que una vez queden renovadas las viejas luminarias, entre todos ayudemos a mantenerlas en buen estado, a denunciar a todo aquel que intente destruirlas, en otras palabras, a tener sentido de pertenencia por el moderno alumbrado que tendrá Cúcuta.