El bajo rendimiento de Cúcuta en materia de competitividad, que la deja en el puesto 20 entre 23 ciudades del país, alertó al Concejo dada la escasa mejoría en aspectos estratégicos como este, para la recuperación económica de la ciudad.

Por ello, se sugirió que desde la corporación nazca un acuerdo municipal para que las administraciones municipales se obliguen a cumplirle a la innovación, la investigación y la competitividad.

El concejal Oliverio Castellanos, proponente de la iniciativa, señaló la necesidad de que los gobernantes comprendan que “el progreso no es solo cemento y ladrillo, ni pavimentación de vías que se están desmoronando, porque se ha dejado a un lado el apoyo de las empresas y a la innovación”.

Agregó que la Gobernación ha mejorado sus indicadores regionales y este tipo de buenas prácticas deberían ser tomadas en consideración para aplicarlas a la ciudad, y siempre “pensar a futuro”.

“Llevamos cuatro administraciones que se han dedicado al engaño, al sofisma de las calles, las casas, pero de lo que se promete, nada se cumple”, comentó. “Por eso estoy proponiendo que con la Cámara de Comercio y la Consejería de Competitividad de la Gobernación, presentemos un proyecto de acuerdo que incluya la innovación y la competitividad, y que sea una carta de navegación a largo plazo”.

Por su parte, el concejal César Arbey Torres, se mostró preocupado con la situación que se deriva de “falta de voluntad política”.

“No pensamos en nuestros semilleros, en nuestros jóvenes, y los estudiantes que buscan innovación no encuentran la inversión económica seria y comprometida que les permita desarrollar algo que represente al departamento, pues nos volvimos una ciudad netamente comercial”, dijo. “Cúcuta no hace sino ferias, pero no estamos haciendo desarrollo tecnológico”.

Lamentó la fuga de cerebros, y cuestionó por qué no se puede lograr que ese potencial nortesantandereano se quede en la región y sea aprovechado.

“Hace falta que dentro del presupuesto se dejen buenos recursos para que se puedan desarrollar ese tipo de programas”, indicó.

En este sentido, criticó que cuando los empresarios buscan apoyo para generar sus iniciativas y acuden a entidades como el Banco del Progreso “les ofrecen dos millones de pesos, que no alcanza ni para el papeleo”.

Por ello instó a hacer inversión, “con vocación y sentido de pertenencia de los gobernantes”, y enfatizó en que la administración aún está a tiempo de dejar recursos para el desarrollo.

Por su parte, el concejal Juan Felipe Corzo solicitó el acompañamiento de entidades que conozcan el tema de competitividad para que acompañen el estudio del presupuesto municipal para la vigencia 2019, con el fin de comenzar a dejar una partida presupuestal para este asunto.