Las medidas que reclamaban desde hacía mucho rato los cucuteños para frenar las roturas del pavimento que a diario protagonizan las empresas de servicios públicos y los particulares, y que afean la ciudad, por fin tuvieron eco.

El encargado de dar una respuesta fue el concejal liberal Jorge Ricardo Marthey, quien presentó a consideración del Concejo una propuesta para crear el manual de roturas.

Luego de conocer un informe de los secretarios de Infraestructura y de Planeación sobre los daños de las vías en la ciudad por este motivo, quedó al descubierto que en Cúcuta cualquiera puede romper una calle y nadie le dice nada.

Esta omisión de las autoridades está echando a perder millonarias inversiones por concepto de reparación de vías, pues a los pocos días de ponerse en servicio, las empresas de servicio público las rompen para reponer tuberías y, lo que es peor, no las dejan como estaban”, dijo Marthey.

Esto tendrá su fin cuando el Concejo apruebe el manual de roturas, cuyo proyecto se está terminando en asocio con la Secretaría de Infraestructura y se espera esté convertido en acuerdo el próximo mes.

De ser así, sería la primera iniciativa de la autoría propia de un concejal en el actual periodo.

La norma obligará, en un plazo determinado, a todas las personas naturales o jurídicas que intervengan las vías y bienes públicos a suscribir una póliza de garantía con una compañía de seguros para que sean dejadas en las mismas condiciones o mejor que como las encuentran.

Marthey dijo que después de una inspección por las recién pavimentadas vías de la ciudad constató que muchas ya presentan roturas.

El municipio no tiene las herramientas necesarias para proteger el patrimonio de dichos abusos que en su mayoría son hechos por empresas de servicios públicos sin su debida planeación y por particulares con falta de civismo, declaró.

*La Opinión