A partir del primero de septiembre, viajar por la Central de Transporte de Cúcuta resultará mucho más seguro de lo que hasta ahora ha sucedido.

Un acuerdo suscrito entre la gerencia del terminal y los representantes de las 25 empresas transportadoras que parten desde allí permitirá acabar con el desorden que ha imperado en el abordaje de los buses, pero también con la inseguridad que se generaba por la presencia de personas ajenas a los viajeros.

El acuerdo, según el gerente de la Central de Transporte, permitirá también mejorar los servicios logísticos de atención y movilidad dentro de la Central de Transportes–Estación Cúcuta.

El funcionario explicó que las empresas transportadoras asumirán el control de ingreso de los viajeros a la zona operativa de ascenso vehicular.  

Esto quiere decir que solamente conductores con turno de operación y pasajeros con tiquetes comprados formalmente podrán ingresar al lugar de abordaje, algo que antes no sucedía, dijo Sandoval.

Con esto también se pone fin a los llamados arrastradores que servían de intermediarios entre incautos viajeros y las empresas de transporte, los cuales incluso eran los que ponían el precio del tiquete.

“Esta alianza hará más segura y confiable el área de abordaje, porque no solo ayudará a ordenar el proceso de compra y venta de pasajes, sino que evita la presencia de individuos inescrupulosos que quieren aprovecharse de los visitantes”, precisó el gerente de la terminal.

A la par con estos cambios, también se acordó con los gerentes de las empresas transportadoras que la vigencia de la tasa de uso (valor que se debe pagar por la permanencia dentro de la terminal) tendrá un tiempo límite con lo cual se obligará al conductor a salir en el horario puntual en el que el viajero compró el tiquete.

Antes los usuarios se quejaban por demoras de hasta media hora en la salida de los buses. Sandoval manifestó que con el límite a la tasa de uso el bus deberá salir de manera puntual a su respectivo destino.

La Opinión