Por las rutas de buses de Cúcuta circulan busetas de transporte público con carteles en que sus propietarios y conductores se declaran en quiebra por la piratería y la poca efectividad de la autoridad de tránsito para frenar y extinguir ese flagelo.

Ahora anunciaron una protesta pacífica prevista para este lunes, con el fin de exigir mayor respuesta de las autoridades ante la crisis.

Un total de 50 busetas partirán desde las 9:30 de la mañana desde Leche La Mejor, en la Zona Industrial, con rumbo a Alcaldía y al Área Metropolitana de Cúcuta (AMC) para denunciar públicamente el severo golpe económico provocado por el desbordado auge del transporte informal.

También aseguran que las autoridades están incentivando la denominada guerra del centavo por el ingreso de más rutas y la llegada de los carros blancos colectivos que operan desde septiembre.

Le puede interesar: Transporte público de Cúcuta en crisis por la ilegalidad

Con la llegada de los vehículos blancos, estiman un descenso de pasajeros que alcanza el 40 por ciento en las rutas que comparten.

“Es una protesta que harán los propietarios de las busetas inconformes por las nuevas habilitaciones que ha hecho tránsito y el AMC y ellos consideran que los están afectando”, explicó Alejandro Rodríguez, vocero del Sistema de Gestión y Control de Flota de la empresa Unibus,  conformada, inicialmente,  por Trasán, Guasimales, TransPetrólea, Cortadistancia, TransOriental y Coomicro.

Mediante un comunicado, la organización advirtió que “las autoridades no protegen el transporte público como un servicio esencial para la comunidad”.

“Muy por el contrario lo atacan públicamente, pero sus actuaciones son contrarias al emitir los actos administrativos ilegales que ya no nos dejan dormir pensando que ruta nueva o cambio de recorrido autorizado a otra empresa nos va a afectar al día siguiente”, añadió.

Según recientes declaraciones entregadas a La Opinión por José Luis Duarte, Secretario de Tránsito de Cúcuta, la piratería “la piratería es un problema de parte y parte” refiriéndose al abandono de rutas que ha hecho el transporte de bus en la ciudad, lo cual obedece a múltiples factores como el mal estado de las vías.

Sin embargo, son los taxis colectivos amarillos los que mayor dolor de cabeza generan al gremio.

“La diferencia con el transporte colectivo de forma ilegal, es que el pasajero puede modificar las rutas y el taxista lo hace”, agregó Rodríguez.

“Eso a los propietarios no les sirve. ¿Quién va a querer montarse a un transporte colectivo que no va por dónde la persona lo desea?”, puntualizó.

Por otra parte, según el subdirector de Transporte del AMC, José Gregorio Botello, se siguen haciendo operaciones contra este servicio y se han mostrado resultados a los empresarios de bus en mesas de trabajo.

“La realidad es otra. Usted va a la calle y se da cuenta que todos los taxis ilegales están trabajando de piratas y por todas las rutas que todo el mundo sabe”, indicó el vocero de Unibus.

“Es más, se tiene entendido que el AMC no tiene contratado personal para hacer operativos”, concluyó.

Pese a la realidad, el AMC indicó que en diciembre se tiene programada una nueva entrega de resultados, con el fin de mejorar el servicio en la ciudad.