La estrategia del municipio que fue presentada en la comisión del plan del Concejo, con la cual se busca modernizar el alumbrado público de Cúcuta plantea que a 31 de diciembre de 2018 deberán estar reemplazadas las cerca de 50 mil bombillas de luz de sodio que hoy iluminan de noche la ciudad, por otras de luz led o luz blanca.

Esa es la principal exigencia para el futuro concesionario al que le sea adjudicado el contrato a 20 años que solicita el alcalde César Rojas en el proyecto de acuerdo que está en trámite en el cabildo, y que entrará a reemplazar a la actual concesión que finaliza el próximo año.

El secretario de Planeación, Orlando Joves, dijo que la nueva concesión no será como la actual, que solo cambió bombillos en mal estado, sino que además de renovar en ciento por ciento el  alumbrado público, deberá invertir en la ampliación de la cobertura, todo en luz led. Cada año, el alumbrado público factura 2.300 millones de pesos-

El plazo que se le da al nuevo concesionario para cumplir con la modernización es el primer año de los 20 a los que está planteado el contrato, dijo Joves.

Si al municipio le correspondiera cumplir con esa tarea hoy, no tendría los recursos que demanda la modernización. Por ello es que se plantea la concesión, dijo el funcionario, quien además reveló que a medida que vaya transcurriendo los años, la tarifa que hoy deben pagar los usuarios irá teniendo un alivio gradual debido al ahorro de energía que se tendrá de pasar de luz de sodio a luz led.

“La misión es que desde el primer día de la concesión el contratista reemplace lámparas y paulatinamente, a partir del quinto año, se inicie con la expansión”, dijo Joves.

En el año 15 de la concesión, plazo fijado para el fin del ciclo de vida útil de las lámparas led, el contratista deberá cumplir de nuevo con la renovación del ciento por ciento de las bombillas que hagan parte del alumbrado público, lo cual garantizará un servicio eficiente, precisó Jovez.

Agregó que lo que se va a hacer es con base en los mismos recursos que hoy se perciben, ni tampoco se subirá la tarifa.

El recaudo del servicio queda igual que como está operando hoy. A la fecha, ninguna empresa ha hecho ofertas para manejar el alumbrado.

La comisión del plan del Concejo valorará la información de los estudios técnicos y financieros y emitirá la próxima semana su primer veredicto sobre la viabilidad de esta concesión, dijo la ponente del proyecto, Nelly Santafé.

Ponente aclara

La ponente del proyecto de acuerdo de concesión del alumbrado público, Nelly Santafé, aclaró que si bien la Corte Constitucional dejó sin piso el cobro de la contribución del alumbrado público, los municipios se acogieron a la Ley 97 de 1913 para continuar garantizando la continuidad del servicio con el cobro del impuesto.

Dijo que lo que solicitó la alcaldía en el proyecto de acuerdo son facultades para proceder con el proceso de concesión, luego entonces hay que aclarar que el Concejo no va a decir quién es el concesionario, esa misión le corresponderá a la alcaldía, en caso de que sea aprobado el proyecto.

El alumbrado está atrasado: Concejo

A juicio de los concejales y de la alcaldía, la actual concesión de alumbrado público que vence el próximo año no amplió la cobertura ni modernizó el servicio.

Solo fueron instaladas unas 900 bombillas de luz led en sitios especiales de la ciudad, como la prolongación de la avenida Cero, la plaza de banderas y los parques de la zona centro de la ciudad.

El actual interventor de la concesión que maneja la Phillips-Diselecsa, Adrián Pompeyo, manifestó que en la ciudad hay instaladas unas 47 mil luminarias.

Una de los debates que espira a dar el Concejo es sobre si el municipio paga la energía más cara del país. Pompeyo mencionó que en la actualidad el precio promedio del kilovatio hora está por el orden de 380 pesos mensuales y por el consumo de energía para el alumbrado mensual se pagan unos mil millones de pesos.

Dijo que en la actualidad se recaudan alrededor de $2 mil 300 millones mensuales, sin embargo, hay grandes empresas, como Ecopetrol, Vatia, Oleoductos, que le deben al municipio por concepto de este servicio.

El año pasado, la alcaldía denunció que solo Vatia le adeudaba $706 millones.

La Opinión